Derek intenta construirle a Meredith la casa de sus sueños, mientras que ella está preocupada por tomarse las hormonas para la fertilidad. Por otro lado, Mark y Arizona empiezan a estar en desacuerdo por las pruebas médicas que tendrían que hacerle al todavía no nacido bebé. Teddy tiene el caso de un chico con fibrosis quística al que tienen que hacer un trasplante de pulmones y Owen tiene por paciente a Adele (mujer del jefe Richard) porque se ha vuelto a caer en el centro comercial. El ensayo clínico de Derek sigue adelante y tienen a una paciente el cual su hijo le recuerda todo: Meredith se fija que el niño tiene una protuberancia en el cuello y manda a un médico que se lo examine. Lexie descubre que la novia del chico con fibrosis quística que necesita pulmones también padece la misma enfermedad, por lo que es peligroso que ambos estén juntos.
Richard le pide a Miranda que se ocupe ella de su mujer. Meredith empieza a tener problemas de visión pero se niega a aceptarlo. Con la excusa de ayudar a Meredith, Alex habla con Lucy e intenta pedirle una cita. Arizona está ocupada y no puede hacerse cargo del hijo de la mujer con Alzheimer, por lo que el doctor Stark ocupa su lugar: tiene un higroma cístico y tienen que extirpárselo antes de que le cierre la tráquea y muera. Lo malo es que el doctor Stark, como sabemos, es un auténtico capullo: como sus padres están centrados (al igual que el niño) en el Alzheimer, exige que Meredith llame a asuntos sociales, lo que escandaliza a la propia Meredith, a Arizona y a April. A Miranda le parece extraño que Adele cambie tanto de versión, por lo que le hace la prueba de alcoholemia. Teddy le da un ultimátum a su paciente: o rompe su relación con su novia, o le niega el trasplante, ya que otra gente necesita esos pulmones y si la pareja sigue junta, los pulmones se estropearan en unos meses.
Cuando le comentan a los padres que un trabajador social tiene que hacerles una visita, empiezan a discutir, y el niño para calmar a su madre le canta una canción de su cantante favorito, Johnny Cash. Al dar negativa la prueba de alcoholemia, Miranda habla con Meredith y termina pensando que Adele tiene Alzheimer. La pareja termina rompiendo para que él pueda tener el trasplante de pulmones. Callie finalmente le da la razón a Arizona, pero ambas se asombran cuando Mark le da las gracias, porque lo único que quería era que Callie pensase por ella misma y no influenciada por los demás. Meredith termina dándose cuenta de que no puede operar bien por falta de visión. Owen le plantea a Cristina tener un hijo ya que piensa que cambiaría de forma de pensar tras todo lo vivido, pero Cristina se niega. La ‘ceguera’ de Meredith está causada por las hormonas que toma, y Lucy le exige que deje de usarlas por peligro de no ser reversible.
Gracias a Lexie, la novia del paciente rompe definitivamente su relación, para no terminar matándose el uno al otro. El doctor Stark entra en razón gracias a April y no llaman a asuntos sociales. Miranda aconseja a Richard que hable con Derek porque evidentemente a Adele le pasa algo en la cabeza. Tras haberle dado la noticia al paciente de que su novia se ha ido para siempre, Jackson le confiesa a Lexie su amor por ella. La sorpresa del capítulo es que el doctor Stark le pide una cita... ¡¡¡a APRIL!!!! Y todo porque ha sido la única persona que le ha hecho cambiar de opinión en muchos años y, sorprendentemente April acepta. Arizona y Callie, una vez en casa, empiezan una discusión porque Arizona no quiere que en su vida esté Mark. April en casa va al baño donde Lexie se está duchando (con Jackson) para contarle lo de Stark, pero Lexie la echa para seguir pasándolo bien con el doctor. Richard retira a Meredith de todas las cirugías mientras siga con su nublosa visibilidad y después, aunque le destroza el alma, le pide ayuda a Derek para Adele.
OPINIÓN: En realidad ha sido un capítulo bastante normalito: ni sobresaltos, ni muchas sorpresas, pero tampoco llegas a aburrirte. El que me 'preocupa' por así decirlo es Richard, ya vivió el Alzheimer por la madre de Meredith, y todo apunta a que tenga que volver a vivirlo con Adele. Ya es mala suerte.
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