Para empezar, no fue un episodio trágico, pero si muy Greek y nos relata la venganza de las nerds, literalmente. Un episodio muy ameno y encantador, aveces perezoso pero divertido.
Greek Tragedy está enfocado en Naomi (otra vez), quien juró venganza contra las Kappa, y parece que va en buen camino. Ingresó a una hermandad empollona de chicas socialmente excluidas, y decidió internamente, que éste sería su medio para adentrarse en el sistema griego universitario. Después de arreglárselas para ser presidenta, convirtió a las patitas feas, en bellas mujeres. Y lo logró, típico.
Mientras tanto, Dixon está ensimismado en crear una pista musical para un productor musical y lo haría con la ayuda de Navid, pero su buen amigo decidió cederle el estudio a nadie mas y nadie menos que Justin Bieber. Mala decisión, ¡en todo sentido! Dixon empezó a mostrar sus cambios de humor. Ivy por su parte, siente que su marido va de mal en peor, pero parece que a nadie le importa. Raj tiene cáncer, hay que entenderla.
Liam y Jane tampoco están en suelo estable. La joven viuda descubrió que estaba embarazada y Liam decidió hacerse cargo del crío que ni siquiera es suyo (What!?). No lo juzguen, después de todo Liam ya no es aquel chico rebelde que no le importaba lo que la gente pensaba de él y hacía lo que le daba la gana. Annie, entendió el mensaje, pero tampoco puede reclamar mucho después de haberse convertido en una acompañante o professional scort.
Parece que ahora sí están creciendo los chicos de Beverly Hills, y al parecer no quieren dejar de ser niños. Ahora, ¡solo falta que Liam se haga modelo o que Naomi quede embarazada! Oh, esperen, ¡eso ya ha pasado!
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