La season finale de esta magnífica serie ha conseguido un 1.9 en las demos, aumentado en un 12% su audiencia de la semana pasada.
Crosby y Jasmine están más enamorados que nunca. Cuando anuncian a toda la familia su compromiso e inminente boda (a finales de semana), Crosby destituye a Adam como el padrino y ambos se pelean delante de toda la familia debido a la oferta por el estudio. Finalmente, tras una especie de reconciliación de hermanos, la pareja se da por fin el si quiero en una bonita ceremonia, aunque Adam no llega a ser el padrino.
Zoe visita a Julia y se disculpa diciendo que no lo supo hasta que el bebé nació (te odiamos igualmente, Zoe). La pareja decide ir a una agencia de adopción y la mujer encargada les pregunta si estarían dispuestos a formar parte de un proceso de adopción más rápido, donde las madres no han firmado todos los papeles ni seguido todo el proceso. Al final de la boda, Joel y Julia reciben una llamada sobre un niño, Victor, cuya madre ha sido encarcelada y ha denegado sus derechos para evitar que el niño acabe en un centro de acogida.
Amber habla por fin con Bob y le pide si puede regresar al trabajo solo como su asistenta, mientras Amy le confiesa a Drew que está preparada para acostarse con él. Por otro lado, Sarah rompe con Mark porque no sabe si podrá ni si querrá tener hijos y no quiere que él renuncie a eso. A pesar de todo, Mark aparece en la boda y le pide matrimonio
La palabra que mejor describiría el capítulo es repentino. ¿Desde cuando Sarah no quiere tener más hijos? Me ha partido el corazón verla romper con Mark, pero me ha gustado ese final, no me esperaba que él volviese. Espero que su respuesta sea sí. Al final, Julie y Joel han tenido un final feliz con el nuevo niño, Victor, quien parece de la edad de Sydney. ¿Creéis que traerá problemas?
La primera vez de Amy y Drew ha sido a la vez natural y tierna, me ha gustado cómo lo han llevado. Además, me ha hecho mucha gracia la pelea entre hermanos y entendía las dos perspectivas, aunque lo del discurso del nuevo padrino (Billy Riggins de Friday Night Lights) ha sido muy predecible.
Una gran temporada para una gran serie; aunque en esta última mitad he echado de menos tramas para Haddie e incluso sobre Kristina y su nuevo bebé, del que han pasado completamente. Quizás lo veamos la siguiente, que promete más luncheonette, otra posible boda y un nuevo hijo al que conocer.
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