Después de tres años, Louis C.K. regresa a Parks and Recreation para participar en un episodio, cómo no, redondo y tremendamente bueno. Además, la reaparición de su personaje, el policía Dave, demuestra cómo ha cambiado la serie, de cómo ha sufrido una evolución constante en la que Dave, al regresar, no encaja para nada. Aunque me ha encantado la aparición especial del creador de Louie, no obstante, no recordaba que fuera exactamente como nos lo han intentado vender: mientras que el Dave de siempre era un tipo serio sin más, este Dave parece sufrir alguna especie de transtorno que le hace tener un comportamiento un tanto extraño (e incluso estúpido en algún momento) y soltar palabras mal dichas o inventadas cada dos por tres. ¿Quizás sea para poner en mejor lugar a Ben? ¿o es que estar lejos de Leslie le ha vuelto loco?
Y es que Dave regresa a la ciudad para un evento de su antigua comisaría y se cruza con Leslie y Ben porque éstos quieren convencer al jefe para que les respalde en su campaña. El problema está en que el jefe apoya a los Newport y que Ben... teme irracionalmente a los policías, a pesar de que siempre ha cumplido la ley. Este miedo dará mucho juego en el episodio (¡la escena final del baño!) pero el interés de este tema está en que, precisamente, Dave es policía y es a él a quien le toca mover ficha. En una cena romántica en la que se acopla, Dave le dice a Leslie (cuando Ben está en el baño) que sigue enamorado de ella. Esto, como es normal, causará bastante tensión especialmente cuando Dave insiste en tener una charla a solas con Leslie (qué lío lo del orden de intervención) e incluso acaba esposando a Ben a un urinario del baño (aunque tiene su móvil en el bolsillo). Al final se arrepiente y hace las paces con Leslie e incluso le ofrece pegarle otro puñetazo al hombre de los bolos (hace dos episodios).
Pero Dave no es el único que ha regresado: Duke Silver, el saxofonista (y enésima personalidad de Ron Swanson, ¿cuántas tiene ya?) que cada vez que toca hace que las mujeres maduras se derritan, vuelve a hacer una aparición especial al nivel de grandeza al que solo Parks and Recreations puede llegar. El resto del departamento de parques se reúne en un estudio de grabación para grabar el himno de la campaña de Leslie y, casualmente, es el mismo estudio en el que graba Duke Silver, por lo que está todo lleno con sus fotos y Ron tiene miedo de que le descubran (hablando de Ron, atención al comienzo del episodio cuando se tira cinco minutos con la mano metida en los pantalones). Mientras Andy organiza a todos con mano dura (algo que pondría dura a April, si pudiera), Ron graba en secreto una parte de saxofón que consigue que el exigente joven acepte la canción. April, además, es la que se encarga de ir ocultando las pruebas que demuestran que Ron es Duke (platazo a Jerry) y, aunque Tom también sabe la verdad, está muy ocupado tratando que Ann le haga caso y le de otra oportunidad, que al final consigue (it's complicated).
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