Después de casi 22 años de su estreno, Twin Peaks se ha convertido en una serie de obligada visión, tanto es así que FOX Crime España emitirá su reposición a partir del domingo 4 de marzo a las 17:10h . No sólo te introduce al maravilloso mundo de la mente de David Lynch, donde dicta la imaginación desatada y las tramas que rozan la locura, sino que además te provoca una adicción casi insana ante la repetida cuestión que invade casi toda la serie. Y es que, ¿quién mató a Laura Palmer?
La serie se estrenó el 8 de abril de 1990 de la mano de ABC, David Lynch y Mark Frost, convirtiendo la primera temporada en todo un éxito televisivo que levantó montañas de incondicionales fans que pedían más y más. Twin Peaks se divide en dos temporadas, treinta capítulos y una película, Fire Walk With Me.
A pesar de la gran acogida que tuvo la primera temporada, la serie fue medio abandonada hacia la segunda parte de la segunda temporada, debido a que David Lynch estaba promocionando su película Corazón Salvaje. Aun así, después de la resolución de la trama central, la serie estuvo columpiándose entre tramas que no llegaban a nada concreto, y ése hubiera sido su final, si no fuera por los fans, que pidieron a la cadena que le dieran otra oportunidad. Así sucedieron los últimos capítulos, en los que se introdujeron nuevas historias interesantes, pero aquello no fue suficiente y acabaron cancelándola en Junio del 91.
Tal día como ayer empiezaba la serie con el hallazgo del cadáver de Laura Palmer y su investigación por parte del Agente Especial Dale Cooper del FBI (Kyle MacLahan, Desperate Housewives). Y a pesar de la simpleza que pueda suponer una trama como esta, la serie le da totalmente la vuelta. Y es que, aunque ese sea el eje de los primeros 16 capítulos, lo interesante lo guardan todos los personajes que habitan en Twin Peaks.
De este modo se nos van presentado y descubriendo todos los ciudadanos de esta localidad ficticia, además del ya mencionado Dale Cooper, al que es imposible no cogerle cariño (y a su sempiterna grabadora). Además del agente del FBI, también existen personajes tan míticos como el Sheriff Harry S. Truman (Michael Ontkean, The Descendants), su ayudante Andy Brennan (Harry Goaz, Earthling), la camarera Shelly Johnson (Mädchen Amick, Freddie), su novio Bobby Brigs (Dana Ashbrook, Crash), el dueño del hotel Ben Horne (Richard Beymer, Murder, She Wrote) y su hija Audrey Horne (Sherilyn Fenn, Gilmore Girls). Y es que, en esta serie, cada personaje es un mundo. Y no sólo porque lo albergan sus historias, sino por el componente paranormal y extraño que inunda toda la serie y que parece rodearles. Hasta el bosque que rodea el pueblo parece tener vida propia y jugará un papel bastante importante en la segunda parte de la serie.
Poco a poco, se descubre que Laura Palmer no era la chica buena que parecía ser, sino que estaba viviendo una doble vida, en la que ejercía de prostituta, engañaba a su novio con el motero James Hurley (James Marshall, A Few Good Men) y además era adicta a la cocaína. Las cosas se empiezan a torcer en la aparentemente idílica Twin Peaks. Asimismo, la muerte de la joven parece haber trastocado a los habitantes de la famosa localidad: su padre (Ray Wise, Reaper) desarrolla una crisis nerviosa de la que parece no levantar cabeza, su mejor amiga, Donna (Lara Flynn Boyle, The Practice) empieza a salir con su novio y se revela que el psicólogo de la difunta tenía una obsesión con la misma.
Por otra parte, Dale Cooper tiene que soportar las incesantes insinuaciones de Audrey Horne, quien se ha enamorado perdidamente de él. Y si hasta aquí todo parecía más o menos normal, con sus peculiaridades y rarezas, la cosa se torna oscura ya que el agente Cooper empieza a soñar con seres sobrenaturales: con el hombre manco llamado Mike, con la personificación del asesino de Laura Palmer llamado Bob, con un gigante, con un enano inquietante que baila en habitaciones rojas... Si la cosa se había torcido un poco, aquí es cuando David Lynch la remata. Y es que yo he llegado a tener pesadillas con el enano bailón. A pesar de lo que pueda parecer (si es que se llega a tener algo en claro de estos sueños), el agente Cooper se lo toma como un montón de señales que debe descifrar para poder encontrar al asesino.
La trama va avanzando con la investigación del agente Cooper, quien poco a poco va descubriendo que los habitantes no parecen ser lo que son. Así, se revela que Ben Horne posee un prostíbulo en la cercana Canadá, donde incluso su propia hija es recluida y enganchada a la cocaína. La primera temporada termina con un cliffhanger y sin todavía saber quién es el asesino.
A estas alturas y debido al éxito que habían tenido, los productores no querían alargar la trama del asesinato mucho más e instaron a Lynch y a Frost para que lo desvelaran en la primera parte de la segunda temporada. De este modo, en el capítulo decimosexto de la serie se descubre, ante la atónita mirada del espectador. Las razones y las claves para llegar hasta ahí, cada cual las puede interpretar a su manera, y es que el propio David Lynch ha reconocido más de una vez que él no hace películas (en este caso, serie) con una sola razón, sino que deja que el espectador sea quien decida cómo entenderlo. En resumen, un quebradero de cabeza que a algunos les puede parecer divertido y a otros un aburrimiento.
Una vez la trama principal se ha resuelto, la serie patina entre varias subtramas, sin que vuelva a tener el enganche que tuvo la primera parte. Cooper se queda un tiempo en el pueblo, atormentado por los fantasmas del pasado en forma de partida de ajedrez. Y es que el bueno de Cooper había tenido un affair con la esposa de su compañero años atrás y ahora éste volvía para vengarse. Además, poco a poco Cooper va aprendiendo de los bosques que rodean Twin Peaks. Y aquí es donde se confirma que no es un pueblo nada normal: en sus bosques habitan dos logias, la Blanca y la Negra. De este modo, Mike, el gigante y Bob procedían de esas logias.
Y no sólo eso, sino que Cooper se enamora de Annie Blackburn (Heather Graham, Scrubs). Todo parecía ir genial para el agente del FBI, hasta que su ex-compañero la secuestra y la mete en la Logia Negra , donde se descubre que habitan varios Doppelgangers de los habitantes de Twin Peaks. La serie ya parecía que no podía dar más giros surrealistas, hasta que se descubre el gran cliffhanger con el que termina la segunda temporada y la serie.
Muchos de los fans se mostraron totalmente en desacuerdo con la cancelación de la serie, sobre todo después del impactante final que te deja pegado al sofá con los ojos como platos. Yo me sentí igual al principio. Pero después de pensarlo mejor, decidí que a pesar de las innegables habilidades de Lynch a la dirección y del desconcertante final, no podría haber sido más perfecto.
Finalmente, añadir como anécdota que el propio David Lynch interpretó un papel en la serie, el del agente sordo del FBI, Gordon Cole, y que incluso otro futuro agente del FBI (David Duchovny, de los Expediente X) aparece aquí de agente travestido. Así que si estáis buscando una serie que rompa con todos los tópicos y que os haga rabiar y gozar al mismo modo, no dudéis en ver Twin Peaks. Además podréis disfrutar de la famosa banda sonora de Angelo Badalamenti. Os prometo de primera mano dolores de cabeza y pesadillas angustiosas.
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