Tras varios episodios excelentes, no ha podido faltar uno a la misma altura. No existe la completa seguridad de que la cadena renovará o cancelará la serie, pero tan solo faltan tres episodios para encerrar esta temporada. Por otro lado, algunos somos optimistas y esperamos tener a Nikita por mucho más tiempo. Hablando de entradas pasadas, y tras una entrada altamente dramática, obtuvimos un muy esperado acercamiento a Birkhoff y el equipo se embarcó nuevamente en una persecución llena de adrenalina. Sin duda, un episodio de relleno muy acertado.
Emocionalmente, el equipo se ha acercado mucho, y tanto Alex como Birkhoff han madurado fantásticamente. Cuidan de sus amigos y se apoyan mutuamente, aunque Nikita sea un hueso duro de roer. Todo empezó cuando Nikita convenció a Birkhoff de usar sus 20 millones de dolares, para llevar a Percy a la bancarrota, y por inercia, a División. Sin embargo, cuando Percy termina robando todo (ladrón que roba a ladrón), Birkhoff y Nikita tienen un enfrentamiento. Es entonces cuando el equipo tiene una última oportunidad de atrapar a Percy nuevamente, pero Birkoff es arrestado al intentar rescatar sus pérdidas, como el mítico hacker, Shadow Walker. Nikita decide rescatarlo antes que División lo haga, mientras que Michael y Alex van tras el dinero robado de Birkhoff. ¿Alguién notó la referencia a The Italian Job? Muy acertada, por supuesto.
En resumen, Birkhoff superó su trauma a las armas, no sin antes herir a Nikita y Alex realmente está descubriendo sus sentimientos por Sean. El equipo está unido nuevamente, y el objetivo continúa siendo Percy. ¿Alguien se preguntó donde está Amanda?
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