Los hermanos
Winchester se han tomado un pequeño descanso pero ya han vuelto, y lo han hecho
con un episodio…raro. La verdad que ni ha sido bueno, ni ha sido malo. Resulta
que en el episodio de esta semana, nos hemos metido de lleno en el mundo de los
dibujos. No lo voy a negar los efectos especiales han estado muy bien, pero el
momento del corazón —personalmente— lo he visto mal hecho. Habrá que ver qué
nos deparará la midseason finale.
Cartoon World
Como ya
hemos mencionado antes, nos veremos en el mundo de los dibujos. El caso de esta
semana empieza con la muerte de un hombre, que como si se tratase de unos
dibujos, se le salió el corazón del pecho. Ahí no acaba la cosa, un hombre que
trabaja en la seguridad de un banco muere al ser aplastado por un yunque. Y es
entonces cuando descubren parte del pastel: alguien está aprovechando estas
rarezas para robar bancos. Lo que el ladrón se lleva es dinero y joyas de
ancianos que se encuentran en una residencia. Es allí cuando se encuentran con un
antiguo amigo del padre de nuestros protagonistas. Él es psicoquinético —telequinético
si lo preferís— y en su mente vive en un mundo de dibujos, por lo que todo a
kilómetros a su alrededor se convierte en dibujos. Es así como el director de
la residencia utiliza a su cliente para robar todo al resto de ancianos.
Castiel será el que devolverá al anciano al mundo real para poder detener así al
ladrón.
De Vuelta del Mundo de los Muertos
La verdad es
que todo el asunto de los flashback de Sam y su año sabático no me hacen mucha
gracia. Esta semana, Sam nos muestra cuándo conoció al padre de Amelia. Era un
hombre desconfiado que no soportaba a nuestro protagonista. Él entiende por qué
su hija huye, pero sospecha que Sam también huye de algo y quiere proteger a su
hija. Amelia le hará ver que ambos se quieren y el hombre decide darle una
oportunidad. Lo que no esperaba ninguno es que el antiguo marido de Amelia
parece haber vuelto de entre los muertos, y llama por teléfono a la novia de
Sam sorprendiendo a todos.
Hablemos de
Castiel. Nuestro ángel ha decidido convertirse en un cazador y acompañar a
nuestros protagonistas. ¿Por qué? pues resulta que no quiere saber nada del
cielo, ni volver a pisarlo ni nada. Castiel cree que ha hizo demasiado daño
cuando la época de los leviatanes y se niega a ver el resultado provocado en el
cielo. Teme que por aquello se vea obligado a suicidarse. ¿Qué pensáis
vosotros?
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