La pereza que me da Revenge no es ni medio normal. La primera temporada fue excelente, guilty pleasure de muchos, vicio orgulloso de otros, pero esta segunda temporada, tras catorce capítulos y un ciclo acabado —del mismo modo que hicieron en la temporada pasada— aún no ha encontrado su tono y tiene unos altibajos considerables, con más bajos que altos. Nos encontramos a las puertas de lo que será la segunda tanda de la temporada, con la esperanza de que ese frescor de la primera vuelva. Prueba de ello fue el capítulo de la vuelta de Navidades , en el que nos embriagó la emoción cuando Emily rescató su venganza original y sacó del baúl de los recuerdos —o de la caja de debajo de la escalera— su rotulador rojo para tachar caras de una foto. Eso es lo que queremos, su lucha contra los Grayson en la que se ve sobrepasada por sus sentimientos; su batalla consigo misma por lo que está bien y lo que está mal; su relación con Nolan, Jack y —ya no— Amanda, de interés borroso por las emociones. Nada de CEOs en Grayson Global; nada de hermanos vengativos que atormentan a los Porter; nada de Iniciativas misteriosas de las que poco sabemos. Así de simples somos, pero las cosas claras y el chocolate espeso.
En estos últimos episodios, destacando para bien este último, nos hemos enfrentado a varios cambios:
La Iniciativa y Helen Crowley
El joven Grayson por fin ha salido de su burbuja y se ha dado de bruces con la cruda realidad. Cuando Victoria le cuenta los verdaderos hechos y expone a la Iniciativa, Helen Crowley se presenta en su casa para cumplir la amenaza que en su día hizo. Pero mamá pato —y más si mamá pato es la Reina Victoria—, que no puede permitir que nadie amenace a su hijo, no duda en acabar con la vida de Helen, metiendo a Daniel de lleno en "terrirorio Grayson", algo no muy recomendable, pero al fin y al cabo inevitable.
Mientras, en el otro bando de la historia, Aiden recluta a Padma para ayudarles una vez se descubre que ayuda a La Iniciativa por la misma razón que él: secuestraron a su padre. De momento las cosas no le salen todo lo bien que deberían —el dedo amputado que le mandan lo demuestra— pero es la única puerta que les queda por abrir al Team Emanda. ¿Conseguirán algo?
Los Señores Porter
Con un Jack afeitado que nos recuerda a el papel de Nick Wechsler en Roswell, asistimos a su unión con Amanda y su posterior luna de miel; un viaje que no salió muy bien. Cuando parecía que todo se había arreglado con los hermanos Ryan gracias a un chantaje bien orquestado por Amanda, todo se tuerce al colarse Nate, el vengativo, en el barco en el que los recién casados van a realizar su viaje. Con sus más y sus menos, todo parece solucionarse —gracias a Emily y Nolan, que acuden al rescate usando su tecnología punta—. Jack, herido de bala, entra quirófano cuando Nolan le lleva al hospital, mientras Emily va en busca de Amanda al Amanda (valga la redundancia). A punto de escapar ilesas estuvieron, pero Nate Ryan, dispuesto a todo, hace explotar el barco, acabando con la vida de Amanda, que yace inerte en los brazos de Emily; una razón más para que su odio se avive. Después de todo, si no fuera por Conrad Grayson eso no habría pasado.
Es un alivio librarnos por fin de Amanda, pero tampoco le deseábamos una muerte así, ahora ha dejado a un marido viudo y un hijo huérfano. Esperemos que Jack no lloriquee demasiado, que se pone un poco insoportable. ¡Únete a Emily! ¿No sería genial?
Ahora queda esperar hasta el 10 de marzo para seguir con la temporada, para esperar que Revenge vuelva a sus inicios, para rezar por capítulos como el de esta semana o el de después de Navidades, en el que la acción, la venganza y una arpía como Victoria están servidas.
Promo
*
De este primer capitulo me molestan algunas cosas:
ResponderEliminar1. ¿Cómo es posible que Amanda acceda tan fácilmente al computador de Emily? Para ser esta última una mujer tan inteligente, tener un amigo experto en computadoras y guardar información tan vital, es absurdo. Y además, no es sino iniciar sesion ¡y el primer pantallazo que le aparece a la Amanda es precisamente la información que necesitaba! No es lógico con el ambiente de intriga, mentiras y peligro en el que se basa la serie.
2. La doña de la Iniciativa: forma parte de la cabeza de una organización casi omnipotente, pero ella se encarga personalmente de los mandados. Que se presente ella misma en la casa de Victoria tampoco me cuadra ¿si son tan poderosos e irrastreables, por qué no mandar mejor a un esbirro? Además ¿se va a hacer semejante trabajito sin llevarse un guardaespaldas, un chofer o algo? Yo se que no tiene que ser realista, pero si la iniciativa es tan amenazante como proponen estos detalles no cuadran.