‘Excitando la curiosidad de América’. Bajo esa premisa
Masters of Sex nos ha mostrado en doce capítulos cómo se fraguó el primer estudio sobre la
sexualidad humana, capitaneado por un distinguido y respetado doctor, con
problemas familiares no resueltos, y una joven liberal, madre soltera, cuya
ambición e inteligencia buscan hacerse un hueco en un mundo de hombres.
La primera temporada de la aventura de Bill Masters y
Virginia Johnson llegó el domingo a su punto y final en Estados Unidos, con la
promesa de una segunda temporada que llegará el próximo año (aún no hay fecha
concreta), y una audiencia de 1.2 millones de espectadores.
Tras un affair camuflado como participación voluntaria en su
propio estudio, el doctor Masters se distanciaba de Virginia en uno de los últimos episodios pagándole por su ‘contribución’, quien finalmente dimitía y abandonaba el
proyecto para trabajar con la única doctora del hospital, en
su intento por implantar la práctica obligatoria de citologías para prevenir un tipo de cáncer que ella misma
padece, tal y como confesaba al personaje de Lizzy Caplan en uno de los
momentos más dramáticos de la serie.
En cuanto a las tramas sentimentales, con Virginia y Ethan
otra vez juntos y el doctor Bill Masters preparando la presentación oficial de
su estudio ante todos los colegas del hospital, llegábamos al duodécimo y
último capítulo del drama de Showtime. En él, Ethan marchaba a California a
entrevistarse para un posible puesto de médico en la UCLA, y una embarazadísima
esposa de Bill Masters ayudaba a Jane a preparar el esperado simposio de
nuestro protagonista, que se auguraba histórico, no sólo por las revelaciones de su estudio, sino por la nada convencional presentación de los
mismos, a través de los vídeos filmados por Lester con aspiraciones científicas.
Pues bien, los pronósticos más pesimistas se cumplían y la
audiencia del doctor Masters, compuesta mayoritariamente por hombres, se
escandalizaba ante las pruebas de que las mujeres “eran sexualmente superiores”
a los hombres por su capacidad multiorgásmica y los vídeos mostrados durante la
sesión, en el que aparecía la (ya 'famosa') vagina de Jane y el cuerpo desnudo de
Virginia, presumiblemente rodado por el propio Bill sin ella saberlo. Finalmente,
el aluvión de críticas por lo blasfemo y atrevido del proyecto provocaba el
despido de Bill Masters al final del capítulo. Mientras él se desquitaba con alcohol junto a su ex jefe Barton Scully, a quien hábilmente
consiguió salvar de la quema, su mujer Libby daba a luz en un hospital a su
primogénito, y una vez más faltaba sin saberlo a sus responsabilidades como marido.
Otra de las tramas de Masters of Sex,
magistralmente sostenida por los secundarios Allison
Janney y Beau Bridges, como el matrimonio Scully, nos dejaba en el último
capítulo al rector y su esposa tratando de lidiar con la ya confesada
homosexualidad de este, encubierta durante los treinta años de su matrimonio.
Su esposa Margaret, todo un ejemplo de mujer abierta y comprensiva, rechazaba
la idea de su marido de someterse a un tratamiento de electroshock para abandonar sus tendencias homosexuales, por miedo a
las posibles secuelas en su memoria. Aun así, la trama se quedaba suspendida tras
la confesión de Scully a Bill de que pensaba lobotomizarse aun sin el apoyo de
su mujer, con el anhelo de convertirse así en el hombre 'normal' que necesitaba su esposa.
Así, y con el punto cómico y ligero que aportaba el primer
beso de Lester y Jane en pantalla, llegábamos a los últimos minutos de metraje.
Virginia, a quien horas antes Ethan había propuesto matrimonio por teléfono desde California, leía sin
dar crédito su nombre en la cubierta del informe en el que Bill había reunido
finalmente todos los datos del estudio, ese al que los dos habían
dedicado tantas horas de trabajo y noches de complicidad e
intimidad. Así, la joven veía reconocido su esfuerzo por su colega, pese
a creer que este le había dado de lado. En ese momento, un toque en la puerta
nos anunciaba el épico final, emotivo y esperado a la misma vez, pese a lo
manido de algunos recursos dramáticos como la incesante lluvia de fondo. Tras
anunciarle su despido y la frustración de ver truncados sus sueños
profesionales, el doctor Masters confesaba a Virginia no poder ofrecerle nada más que la verdad. La verdad sobre sus sentimientos...Y entonces, los créditos.
"y el cuerpo desnudo de Virginia, presumiblemente rodado por el propio Bill sin ella saberlo" ¿¿?? es ella la que posa para bill cuando Jane renuncia a aparecer en cámara de esa forma
ResponderEliminarConclusión: me ha encantado! ;) Ahí va mi review ;)
ResponderEliminarhttp://seriesanatomy.blogspot.com.es/2013/12/its-sextime.html
Un saludo y felices fiestas!
Nooo yo creo que ella sabia....si ademas ella esta enamorada de el....yo creo...igual ,hay que esperar para ver.....
ResponderEliminarFelices para ti....y que este año será muy bueno....
ResponderEliminarExcelente serie!!!
ResponderEliminarUna serie muy bien realizada, y con,actuaciones perfectas.
ResponderEliminarcuando dice sin saberlo, se refiere a que ella no sabia que el lo pasaria en la pantalla!!
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