Vaya por delante que calificar a la series de drogas me parece una acción (muy eficaz, sí) de marketing. Solo hay que ver como la mayoría de medios se han hecho eco de este estudio sin cuestionar el contenido o los métodos que se han empleado en el mismo. Pero lo que nadie ha reparado es que, al calificar a las series de televisión de droga o adicción, le estamos otorgando una connotación negativa que en absoluto tienen. Una adicción se produce cuando tu cuerpo no puede vivir sin esa sustancia. ¿Alguien ha muerto por culpa de un consumo excesivo de televisión? Google dice que no. ¿Qué pasaría si nos quitasen las series de televisión de forma irreversible? Pues que encontraríamos otro hobby al que poner de moda en menos de un día.
En resumen, lo que se afirma en dicho estudio es que los espectadores sienten un efecto parecido al de las drogas cuando ven —o les hacen dejar de ver— series de televisión. Sudores, incremento del pulso, de la frecuencia respiratoria... Por norma general, los seres humanos reaccionamos a estímulos y, al ponernos delante del televisor, estamos recibiendo una gran cantidad de ellos en forma de imágenes y sonidos. Pero... ¿Son estos estímulos capaces de producir en nuestro organismo efectos similares al consumo de drogas? No.
Porque, reconozcámoslo, las series de televisión están (muy) de moda. No mereces consideración de pronunciar la palabra seriéfilo si todavía no has visto ESE plano que cierra el cuarto capítulo de True Detective, o si no estás al día de lo que se cuece en la industria audiovisual escandinava. Sí, a ese punto hemos llegado. Queremos verlo todo, en el instante en el que esté disponible. Y eso lo saben todos los medios. No quiere decir esto que sea algo malo, pero tenemos que asumir que ahora todo el mundo se quiere subir al carro de la tele, ésa que hace solo unos años defenestraban, ya sea en forma de canales de televisión, la publicación de estudios como éste para generar visitas... y otras prácticas que no merece la pena reseñar. También podríamos comentar largo y tendido sobre la influencia de las redes sociales en este sentido, pero dejaremos ese envite para un asalto posterior.
Estoy desde luego de acuerdo en lo q dices, xo es verdad que una adiccion no tiene que ser estrictamente a una sustancia, sino que se lo digan a los jugadores compulsivos que quiza llevan 15 años en jugadores anonimos," limpios"
ResponderEliminarAdicto, sin duda. Si hiciesen las películas "de ahora" con la calidad de las series que tenemos, sería adicto al cine también, pero cada vez me decepciona más, así que... 8 episodios de House of Cards en una tarde es adicción.
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