Una buena serie de supervivencia siempre debe retratar cómo aflora el instinto más primario del ser humano y de cualquier ser vivo, sobrevivir a toda costa. The Walking Dead no es una excepción, pero además ha sabido dar mucha profundidad a los personajes a través de diferentes sentimientos, secundarios, pero muy importantes al tratarse el ser humano de un animal racional.
El capítulo de esta semana gira en torno a uno de ellos, la soledad. No en vano, el nombre del capítulo ya nos lo anticipa, Alone (Sólo). En este nos vuelven a contar dos historias en el que el peso de la narración recae sobre cinco personajes, Maggie, Bob y Sasha por un lado; y Daryl y Beth, por el otro. El episodio comienza con un flashback en el que vemos la vida de Bob hasta que Glenn y Daryl lo encuentran en el bosque. Sólo.
Los tres primeros continúan discrepando sobre el caminos que deben seguir. Sasha sólo piensa en sobrevivir, Maggie sólo en encontrar a Glenn y Bob se siente afortunado por no estar sólo. Lo único que les separa es la fe, otro de los temas recurrentes en The Walking Dead. La mayor de los Greene no pierde la esperanza y Sasha la ha abandonado. La supervivencia es más importante para ella, pero este instinto necesita de otros factores como la fe para satisfacerlo. De esto es de lo que se darán cuenta estos tres personajes a lo largo del capítulo, pues sus momentos de soledad les abrirán los ojos.
Daryl y Beth están cada vez más cerca. Están más unidos que nunca pero, paradójicamente, acabarán el episodio separados. La historia entre ambos me parece lo mejor de los últimos capítulos. Esta vez encuentran una casa limpia y en orden, algo de lo que deberían haber sospechado. Aunque, dejándose llevar por el hambre y la comodidad deciden instalarse hasta la llegada del perro señuelo. Una pena porque Daryl estaba a punto de quitarse la coraza y confiar al fin en el ser humano. Pero el destino le depara malas compañías de nuevo, en concreto los tipos con los que Rick se había encontrado previamente.
El último plano del episodio es para Glenn, quién ha llegado a las vías del tren y ha podido ver el cartel de Terminus, con lo que todos los grupos que se habían formado ya han logrado encontrar el camino hacia su reencuentro. Muchos dicen que el refugio está en Atlanta pero me resulta difícil de creer puesto que ya vimos en qué estado había quedado. Sea como sea, parece que esta etapa ha terminado y ya nos dirigimos a la conclusión de la temporada, en la que no espero un clímax muy traumático, más bien una presentación de lo que será la siguiente temporada y los nuevos personajes.
Lo que más me gusta de The Walking Dead es su maestría a la hora de construir personajes, no deja de sorprenderme en este sentido. Lo que empezó como una serie de acción apocalíptica nos regala, capítulo a capítulo, una concienzuda disección emocional de unos personajes muy distintos entre ellos pero con instintos similares.
¿Qué te ha parecido el capítulo Alone? ¿Qué crees que nuestros personajes se encontrarán en Terminus? ¿Cómo crees que será el final de temporada?
Un poco aburrido...
ResponderEliminarTambién creo que la relación entre beth y daryl es lo mejor de los últimos capitulos, me está gustando mucho el rumbo que está tomando la serie
ResponderEliminarDepende de cómo se mire, Jaime. Si vemos The Walking Dead como serie de acción, sí, es bastante aburrida. Pero si la vemos como drama, merece genial.
ResponderEliminarPues van a tardar en llegar tres temporadas porque desde Georgia (Atlanta) hay un tirón, a no ser que haya una elipsis de meses, por lo que no llegarían esta temporada.
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