Si bien su renovación nos supo a gloria bendita a todos aquellos que la defendemos a capa y espada, después de los últimos minutos de la season finale, los días, semanas y meses que queden para que llegue septiembre se nos pueden hacer cuesta arriba. Y es que, al igual que en temporadas anteriores, nos han dejado con la miel en los labios. El último "WHAT?" de Alicia fue el que todos nosotros pronunciamos en nuestras casas, nerviosos, casi aplaudiendo en ese último giro final. Porque si algo nos han demostrado durante cinco años es que los giros argumentales son uno de los ejes fundamentales de esta serie. Y de que manera.
En los últimos capítulos se podría entrever hacia dónde encaminaban el capítulo final de esta temporada, en los que pudimos ver la carrera exprés de Finn Polmar para ser Fiscal del Estado, la consolidación de Florrick, Agos & Associates como un bufete de prestigio y sobre todo, la solitaria lucha de Diane, en su afán de sobrevivir a las traiciones venideras de Mr. Canning y David Lee, acompañada únicamente de la siempre leal Kalinda. La lucha estaba servida en Lockhart & Gardner. Además de las crecientes dudas de Alicia con respecto a la vida, el futuro y su situación actual, consecuencias de la muerte de nuestro querido Will. La evolución de Alicia durante estas cinco temporadas ha sido abrumadora, a la par que justificable e interesante, pero este nuevo matiz resulta más interesante aún. Y es que por primera vez, podemos ver las dudas de Alicia con respecto a su trabajo, algo que nunca se había llegado plantear anteriormente. Las peleas, los malos tragos y la desgracias hacen mella en ella, hasta el punto de llegar a preguntarse si verdaderamente merece la pena.
The Good Wife empezará a hacer de su magia cuando, por error, Mr. Canning y David Lee dejen activada la webcam y desde Florrick & Agos sean capaces de ver lo que pasa en la sala de reuniones contraria todo el tiempo. Sólo les faltan las palomitas y el show está servido. Pero como ya venía prediciendo Mr. Hayden, bien podrían haberse ahorrado bastantes malos tragos si hubieran decidido ser más honestos. Las conversaciones de Diane, Kalinda, Mr. Canning y David Lee acarrearán más de los problemas previstos entre Alicia y Cary. Sobre todo, cuando se descubra que ante la posibilidad de fusionar ambos bufetes, algo de lo que Alicia es totalmente partidaria y Cary totalmente opuesto, este último se chive de las intenciones de Diane a Mr. Canning.
La discusión entre Cary y Alicia es legendaria. La tercera discusión en la que se ve envuelta Alicia en toda la temporada (la primera con Will al enterarse de su "traición", la segunda con Peter sobre su relación), y que marcará un antes y un después en la relación laboral de ambos. Los dos tienen puntos de vista bastante razonables, y los dos actúan de manera impulsiva y egoísta, pero la pelea entre los dos pilares fundamentales del nuevo bufete no puede augurar nada bueno y seguramente marque a ambos personajes de cara a la sexta temporada.
Mientras tanto, ante las últimas revelaciones de que Finn Polmar recurrió al soborno para conseguir algo de paz para él y sus padres debido al pasado drogadicto de su hermana, le saca totalmente fuera de juego en la carrera para la fiscalía. ¿Será esta la última vez que veamos a Finn? Tengo que admitir que el personaje me había llegado a convencer del todo estas últimas semanas, y sería una pena despedirlo para siempre. Ante la pérdida de candidato a quién apoyar, Eli y Peter se plantean a Diane como posible Fiscal del Estado. Una propuesta que la susodicha seguramente se habría tomado muchísimo mejor si no la hubieran desdeñado cuando la propusieron como candidata para Juez Supremo para después dejarla tirada. Pero Diane se encuentra en una encrucijada, y es que Lockhart & Gardner ya no es lo que era. A pesar de contar con todos los votos necesarios para evitar que Mr. Canning se sume a la Junta Administrativa, éste último guarda un importante as bajo la manga. Una carta que no dudará en usar, y que conllevaría darle el poder que ansía o ver cómo el bufete que Will y ella construyeron de la nada se disuelve para siempre. Y al igual que Alicia, Diane también está cansada de pelear.
Pero las cosas no terminan aquí. Alicia, después de la reunión con Diane y el resto del bufete, corre rápidamente a ver cómo su queridísimo Zach se gradúa. Mientras tanto, en la casa familiar, Veronica y Jackie se encargan de la cena mano a mano, y con alguna copa de vino de más. Volvemos a recuperar a una estupenda y sarcástica Jackie, que siempre sabe cómo sacar de sus casillas a cualquiera. Hasta al pobre Eli, que últimamente ve cómo las cosas no le salen como quisiera. Ante la negativa de Diane, y en un momento de cansancio total, después de una cena y momentos familiares, y con Zach marchando de casa, Eli y Alicia, que todavía no es consciente del síndrome del nido vacío del que todos le han advertido durante el capítulo, comparten la solitaria mesa del comedor.
Y aquí es cuando, una vez más, el giro final que pondrá punto final a esta temporada. ¡Y es que Eli tiene la brillante idea de proponerle a Alicia que se presente para Fiscal del Estado! La cara de Alicia es todo un cuadro. Pero evidentemente, para escuchar su respuesta tendremos que esperar varios meses. Personalmente, no me convence del todo esta nueva propuesta, en el caso de que Alicia finalmente se decante por ello. Y es que creo que el trío Alicia, Cary y Diane puede dar muchísimo juego, ahora que finalmente se han vuelto a reunir. Pero quién sabe. Y a vosotros, ¿qué os ha parecido la season finale? ¿Creéis que Alicia se presentará a Fiscal del Estado? ¿Qué opináis sobre la decisión de Diane?
Lo de Diane genial. Lo de Alicia... no quiero.
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