American Horror Story S04E06. Bullseye

Freak Show continúa dando tumbos, pero parece que hay luz al final del túnel, como hemos visto en Bullseye. A mitad de temporada, la serie todavía no ha mostrado intenciones de tomar ninguna dirección clara, pero al menos ciertas tramas empiezan a mostrar cierta coherencia. El entretenimiento, por otro lado, se mantiene plano y sin sobresaltos. Solo esperemos que la serie se encamine en la dirección correcta.

Bette y Dot son la salvación

Puede que el personaje de Dandy tenga todavía una posibilidad de obtener algún interés en Freak Show, y esa posibilidad no solo tiene un nombre, sino dos: Bette y Dot. Las siamesas, atrapadas en el palacete de los Mott, se convierten en el objeto de admiración del monstruito.

Mientras Bette está perdidamente enamorada de él, Dot acepta su estancia como vehículo para lograr su objetivo: poder pagar la cirugía que finalmente la separe de su hermana, motivada por un nuevo milagro médico. Dudo que las siamesas acaben bien, pero mientras tanto podremos ver a un Dandy bastante nervioso (¿qué le hará a Dot?), y esperemos que la madre sea algo más que una madre florero y también tome partido.

Elsa, la loca

Me da mucha pena que el último personaje de Jessica Lange en American Horror Story sea éste. Me resulta, a estas alturas, hasta molesto. De hecho, únicamente ha servido en este episodio de complemento para dar un mayor protagonismo a Paul, que en cuestión de un episodio ha adquirido el estatus de protagonista, con más líneas de guión y hasta dos amantes. Quién lo diría (¿y por qué?). Lástima que hayan utilizado ese truco televisivo tan apestoso como es el de llevar a un personaje a primera plana para después deshacerse de él (no del todo, pero tampoco espero tanta participación en el futuro).

Mientras tanto, nuestra Elsa, loca del coño, sigue creyendo que va a tener su propio programa de televisión y decide resucitar su viejo truco de los cuchillos para tener algo que hacer además de cantar de pena. Se le va de las manos, como era de esperar, cuando se muere de celos al ver que en la semana de su cumpleaños sus empleados están más interesados en recuperar a las siamesas que en conquistar el amor de la alemana. Lo paga con su amante... y así le va.

Las trampas de los cazadores

Lo han vuelto a hacer. Y es una lástima. Con las siamesas desaparecidas, Stanley le propone a Maggie que capturen a Jimmy para venderlo en el museo, pues su plazo se acaba. Resulta que en este dúo dinámico, la falsa vidente es la menos cruel (desaprovechando el potencial de Emma Roberts), y además está bastante pillada por el chico langosta, por lo que propone una alternativa. La solución más sencilla es secuestrar y matar a la mujer más pequeña del mundo, y la adorable Ma Petite no tiene ningún problema con irse con cualquiera. Escena de su muerte y, sorpresa, era otra "visión" como la de los cupcakes la de la semana pasada. 

Sinceramente, pienso en los supuestos villanos de esta temporada, y solo deseo que aparezca la hermana Mary Eunice para repartir guantazos. Espero que Stanley mueva ficha pronto (imagino que sobre las siamesas, cuando las encuentre), porque esto comienza a resultar incluso molesto.