Grey's Anatomy S11E08. Risk

Llegamos al final de la primera mitad de la temporada con un par de giros a las tramas. Empezamos por el más sorprendente quizá: el tumor de la Dra. Herman ahora podría tener una solución. Lo futurible era que le diese un ataque y acabase trágicamente su participación en la serie dejando a Arizona con un pastel serio sin estar del todo formada para enfrentarse a él. Pero no, la hemos visto más viva que nunca, pasándose por la piedra a “la competencia” de Robbins.

El papel de Geena Davis ha sido tan grande en este fragmento de temporada que prácticamente ensombrece al otro plot twist sorprendente de la semana: las complicaciones del bebé de Jackson y April. ¿Qué es más incómodo? ¿Descubrir que el hijo que está gestando la mujer por la que te dejó tu novio está fatalmente malformado o que tengas que destrozarles sus planes de felicidad y país de piruleta sin tener el derecho de regodearte en la desgracia? Papelón para Steph.

Nos lo han dejado excesivamente colgando, eso sí, solamente con que el padre de la criatura se entere de la noticia. Las posibilidades son amplias y no sé por qué me da que podría pasar como con el tumor de Herman y encontrar una vía milagrosa para prosperar y darnos toda una trama de cómo sacar adelante a un hijo con dificultades.

Y hablando de dificultades: el último revés para el MerDer. Se veía venir. Uno no le dice que no a Obama y vive tranquilo. (¿Es Obama o un presidente ficticio?) Derek se lía la manta a la cabeza y dice que sí al proyecto de la Casa Blanca. Le hemos tenido desde la temporada pasada en segundo plano, no siendo ni la mitad de lo que McDreamy debería ser y ya por fin ha dado el paso adelante y se ha dejado de esposa, hijos y otras cargas. Como diría a su hija Ellis Grey, la cual nunca va a descansar en paz: se acabó ser uno del montón.

Al otro lado de la acción tenemos al resto de personajes con sus tramas de hacer tiempo en lo que les llueve la siguiente desgracia. Callie repite trama con Hunt, idéntica a la que tuvimos hace un par de meses. Seguimos sin encontrarle propósito a Owen, totalmente. Mientras Callie tiene como highlight del episodio una escena con su ex de ternura y sufrimiento absolutos.

Y luego Alex y Jo. Jo sigue sin digerir la mypersonship de su novio y Meredith Grey. Y ahora que Arizona también se les ha acoplado, peor. Ahí entra Alex con esa reflexión nostálgica que nos pone los pelos de punta. Del mismo modo que él allá por 2005, siendo odiado por todos, siempre tuvo la puerta de Casa Ellis abierta ahora él debe mantener el hostal en marcha, aunque perjudique a su relación. Ay, la Semilla del Diablo se nos ha quedado en un sentimental con los años.

Ahora, hasta el 29 de enero, calma y dos meses para que Bailey baje de peso de escalera en escalera.