Arrow no es, ni de lejos, la mejor serie que se emite actualmente en televisión incluso muchos la considerarán como su Guilty pleasure particular, pero una cosa es segura, entretiene y mucho. Y no solo puede entretener a los fieles seguidores de DC Comics, sino a un gran público y muy diverso.
Creo que este capítulo ha sido una muestra de ello, si en las dos primeras temporadas nos centrábamos mayoritariamente en casos autoconcluyentes en cada episodio, en esta tercera podemos ver un argumento más sólido que en las anteriores. Como ya comenté anteriormente, Ra’s Al Ghul es un villano de los pies a la cabeza y difícil de vencer y eso se está demostrando en esta segunda tanda de episodios desde el parón navideño.
Ra’s ha conseguido que ahora Oliver tenga dos enemigos en su contra, La Liga de Asesinos y Starling City. El Capitán Lance ha pasado de ser ese punto de apoyo para Arrow y promotor de sus andanzas entre los ciudadanos a querer su cabeza a toda costa.
Pero no saber quién se esconde tras la capucha más famosa de Starling City (¿De verdad no es capaz de reconocer al exnovio y amante de sus hijas tras esa máscara?) es su punto débil y para solucionar eso tenemos a ese gran villano que es Ra’s Al Ghul, para contarle que Arrow es en realidad Oliver Queen y que se quede con una cara de sorpresa mayor que cuando se enteró de que Sara estaba viva.
Si en The Offer nos enfrentamos a uno de los temas típicos de los superhéroes, aceptar que aunque no haya reconocimiento lo que haces lo haces por ayudar a los demás, en Public Enemy hemos asistido al otro gran tópico, ver como la ciudad que defiendes se vuelve en tu contra.
Lance en pantalla explicando a Starling City que la persona responsable de los asesinatos y conocido como Arrow es el alter ego de uno de los ciudadanos más ilustres de la ciudad, Oliver Queen es el gran momento de este capítulo. Olvidemos por un momento que ha vuelto a salir Mama Smoak, de que Ray se ha librado de la muerte con Nanotecnología o que minutos después le ha declarado su amor a Felicity y ésta ha huido vilmente. El protagonista de este capítulo ha sido Quentin y su desprecio hacia Arrow, Oliver o cualquiera mínimamente relacionado (hasta se ha enfrentado a su hija sin dudarlo). Desde aquí hago un llamamiento a favor del Capitán Quentin Lance, esa persona que es la última en enterarse de todo, pero que cuando se entera es imparable.
El desarrollo de este capítulo bien podría ser el de una season finale, con Oliver entregándose a la policía e intentando ayudar a sus compañeros a los que tanto le debe. Pero aún quedan cinco episodios para llegar a ese momento y no hay nada mejor que un cliffhanger para acabar esos 43 minutos de entretenimiento, así es como se presenta Roy vestido de verde ante un numeroso grupo de policías que custodian a Oliver y se entrega. Parece que se han equivocado de persona. ¿Cuál será el plan de Roy? Tendremos que esperar hasta el 15 de Abril para averiguarlo pero para ir abriendo boca la promo de “Broken Arrow” viene cargadita de acción.
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