El viernes pasado se estrenó en la plataforma Netflix Narcos, serie que se centra en la vida del famoso narcotraficante colombiano, Pablo Escobar, el cual comenzó un gran imperio de cocaína en la zona, llegando a exportarla a Estados Unidos y a Europa.
La historia de dicho traficante ha sido contada ya en varias ocasiones y de diversas formas; por eso, en esta ocasión, su director José Padilha ha decidido explorar la historia desde dos perspectivas.
La serie comienza con una voz en off del estadounidense Steve Murphy (Boyd Holbrook), un agente de la DEA que destinan a Colombia para llevar una investigación contra el narcotráfico; es decir, contra Escobar y su banda. De este modo, el director nos ofrece la historia desde el punto de vista estadounidense, hasta ahora no explorado, donde podemos apreciar el poco control y las inútiles medidas que tenían en aquella época.
La serie comienza con una voz en off del estadounidense Steve Murphy (Boyd Holbrook), un agente de la DEA que destinan a Colombia para llevar una investigación contra el narcotráfico; es decir, contra Escobar y su banda. De este modo, el director nos ofrece la historia desde el punto de vista estadounidense, hasta ahora no explorado, donde podemos apreciar el poco control y las inútiles medidas que tenían en aquella época.
Por otro lado, nos ofrece la visión latina, representada por Escobar y su banda, donde podemos apreciar el gran control que tenían en todos los aspectos del país. Tanto es así, que Escobar casi llega a presidente.
La historia no podría ser tan creíble sin el esfuerzo de su protagonista Wagner Moura, el actor brasileño que ha aprendido español en un tiempo récord para poder interpretar al personaje, además de pasar un tiempo en el barrio de Medellín empapándose del acento y la historia de su personaje.
Junto con estos dos actores que manejan el timón de toda la serie tenemos otros muchos que terminan de culminar el elenco tan internacional que presenta la serie: por ejemplo, Pedro Pascal, que interpreta a Javier Peña, policía que colabora junto Steve; o Ana de la Reguera, que se mete en el papel de la guerrillera Elisa para luchar por sus derechos; entre otros.
Por si todo esto fuera poco, la serie nos da grandes lecciones de historia en cada capítulo y nos enseña la situación que se vivía en aquella época, sobre todo en Colombia y Estados Unidos, de manera que no solo conocemos la historia del personaje y su recorrido, sino también un poco de historia general, que nunca viene mal.
Tampoco está nada mal la intro con la que cuenta, ya que nos sumerge en un ambiente latino tranquilo, que contrasta a la perfección con la violencia indiscriminada que se muestra a lo largo de toda la serie.
En general, una serie que está dando que hablar y que cuenta con buenas críticas, nosotros la recomendamos infinitamente.
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