Ahora mismo cualquier serie que venga con la marca Shondaland merece ser vista. Tras la inmortal Grey's Anatomy, la esperpéntica Scandal y la caótica How to Get Away with Murder, la productora de Shonda se ha ganado su oportunidad permanente para cualquier seriéfilo que se precie. La nueva serie protagonizada por Mireille Enos (The Killing) y Peter Krause (Six Feet Under) tiene una premisa prometedora y unos actores destacables, pero el producto final no termina de convencer.
Alice Vaughan (Enos) es una investigadora privada cuya vida parecía perfecta hasta que de repente su prometido, Benjamin Jones (Krause), desaparece con todo su dinero. Él, estafador profesional, la utilizaba para llegar a sus clientes y llevarse de ellos todo lo que pudiese, pero en un giro de lo más culebronesco descubrimos que lo que sentía por ella era más real de lo que él creía.
The Catch tiene una buena premisa, pero no es todo lo cautivadora que suele ser una serie made in Shondaland. Le falta el gancho que tienen otras. Scandal también empezó floja y poco después se convirtió en una de las series más locas de la tele, por lo que al menos se puede tener esa esperanza. En concreto la serie no es de Shonda Rhimes, es de su productora, pero está creada por Jennifer Schuur, que también ha participado en series como Hostages o Hannibal, así que esperamos que según avancen los capítulos Shonda le dé unos latigazos y esto se convierta en algo más que un Revenge con más presupuesto.
A pesar del buen ritmo y la atractiva premisa, hay fallos que probablemente se deban a cosas del piloto, y es que a Enos no se le nota muy cómoda en el papel, mientras que Krause que ha perdido bastante desde los días de Fisher & Sons. Sin embargo, lo más extraño de todo es que, siendo una investigadora privada de alto nivel, haya sido engañada por un estafador. Poco después de descubrirse todo el pastel (y por más que la propia Alice repita una y otra vez que cómo pudo confiar), vemos que ni siquiera el nombre de Benjamin Jones aparece en Google, algo que probablemente haga hasta mi portero.
En cuanto a las audiencias, no ha empezado con muy buen pie. Se estrenó líder de su franja con un 1,2 en demográficos y casi seis millones de espectadores, mientras que en su segunda semana bajó al 1 quedando por detrás de Jennifer López en Shades of Blue y el estreno de CBS, Rush Hour. Las la audiencias acostumbran a bajar a partir de la midseason, con lo que el futuro de la nueva serie no es muy alentador, a no ser que ABC se lance un órdago como el del año pasado y renueve toda su parrilla, incluida Galavant.
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