Cuando pensábamos que Riverdale había alcanzado su máximo esplendor, va y nos sorprende aumentando las dosis de fantasía y mamarrachismo en este episodio. Ahora resulta que los oscuros bosques de Riverdale son una zona de cruising donde Kevin va cada noche a disfrutar de su sexualidad. Y gracias a esto, tanto Midge como Moose siguen con vida. Por un lado, a Betty no le hace ni pizca de gracia que su gran amigo Kevin ande por el bosque mientras hay un asesino suelto. Y, por otro lado, Cheryl apoya las decisiones de Kevin, pero cuando ve que necesita ser advertido, avisa a Betty. Todos pensamos que lo hace por el bien de Kevin, pero los planes de Cheryl siempre van un paso por delante. ¿Qué ganará Cheryl haciendo que Kevin y Betty se distancien de esta forma?
Riverdale no tiene ni un minuto de descanso. El asesino se pone en contacto con los Cooper para que publiquen una carta donde confirma que todos los intentos de asesinato han sido cosa suya. Esto despierta la ira de Archie, que en un momento de valentía crea un grupo de vigilantes, El círculo rojo ¿Cómo iba Riverdale a perder la oportunidad de ser también una serie de superhéroes? Pero esto no es lo único que provoca la carta del asesino; Polly, que sigue embarazada aunque no lo parezca, decide huir de la ciudad porque, según ella, es un posible objetivo del asesino. Nadie la echará de menos.
Betty, además de enfrentarse a la huida de su hermana y a su distanciamiento con Kevin, debe enfrentarse a que Jughead ya no acude a su mismo instituto. Ahora Jughead acude al Southside, que más que un instituto parece una película posapocalíptica ochentera donde las diferentes bandas están enfrentadas. Y como era de esperar, recibe la típica paliza y una de las jóvenes serpientes le acoge en el grupo. Junto a Toni Topaz, la joven serpiente, decide reabrir el periódico del Southside; no hace falta decir que esto va a terminar como el rosario de la aurora.
Y esta semana en el episodio de The Veronica Show: Un drama en un mar de perlas, nuestra protagonista se enfrenta a la temida presentación de su novio a su padre en la típica cena de la que nada bueno puede salir. Pero antes de esto, Veronica nos regala otro de sus momentazos televisivos donde pule su cubertería de plata mientras su madre la amenaza y la intenta poner en contra de su padre. Así son los Lodge, se aman y se amenazan a partes iguales. Y es que esta familia está haciendo todo lo posible para llevarse el premio a la familia más disfuncional e histriónica de la televisión. Durante la cena, Hiram Lodge le sabe bailar muy bien el agua al joven Archie y solo le hace faltan unas palabras para prender la mecha que provocará el gran incendio en Riverdale.
Tras la cena y siguiendo el consejo de Hiram, Archie graba un vídeo con todo su Círculo rojo, sin camiseta a lo Abercrombie, amenazando al asesino de la capucha. En resumen, nosotros somos más que tú y estamos más mazados porque hemos trabajado en la obra.
Por último, destacar que Kevin por fin tiene una trama un poco más interesante que visibiliza y pone de manifiesto la desigualdad que viven los millones de jóvenes LGBTQ+ en las zonas menos urbanas de USA y que ellos no pueden disfrutar de las mismas cosas que sus compañeros heterosexuales si no es por sus propios medios, aunque sean arriesgados.
P.D: El nuevo Reggie tiene el mismo nivel actoral que una patata.
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