Bienvenidos a la semana grande de la televisión estadounidense. Como somos mala gente y no podemos aceptar un "año nuevo, vida nueva" sin antes revolcarnos en la ponzoña del pasado, volvemos a nuestro tradicional repaso de las peores decisiones tomadas en los despachos de las networks. Cadenas de capa caída, cadenas inmovilizadas en su caspa y cadenas con serios problemas de competir en un mercado que ya más que oficialmente las ha devorado como el epicentro de la creación televisiva a nivel mundial.
Cierto es que algunos viejos hábitos se están perdiendo en pro de prácticas más económicas, como es el caso de no venirse arriba con los encargos de episodios y mantener la longitud de las temporadas iniciales bajo mínimos por seguridad. Este año hemos tenido que hacer un esfuerzo ímprobo para encontrar series que hayan recibido el machetazo tan rápido que no haya dado tiempo ni a escribir una crítica atroz. ¿Será porque a Katherine Heigl no le han dejado entrar al set de la Paramount? Quién sabe.
Estos, amigos y amigas, son los cinco fracasos más gordos de la temporada 2017-2018. Y que con toda seguridad se volverán a repetir esta semana.
Living Biblically (CBS)
En tiempos de terrible retroceso social y cultural, CBS tuvo la brillante idea de coger la Biblia, usarla de mantra para una comedia y echarle risas enlatadas. Literalmente todo lo que no esperarías ver en la midseason de 2018, pero se vio. Aunque se vio poco. Señoros, moralinas, cuñadismo, olor a naftalina… Todo ello producido encima por Johnny Galecki, que quería ponerse una medalla más antes del final de The Big Bang Theory. Qué malo es tener dinero y no saber dónde gastarlo.
Me, Myself & I (CBS)
Que CBS hace unas comedias tóxicas para el medio ambiente es algo que no se puede discutir a estas alturas de la jugada. El filtro de la cadena es un señor americano más pendiente de tener un cubo de pollo entre manos que de tener criterio. Me, Myself and I es otro ejemplo de por qué a los hombres de mediana edad en crisis no se les puede dejar escribir: otro señoro se desdobla en tres para "hacer reír" a la gente con su pasado de niño creativo y su futuro de millonario amargado. Duró 6 episodios antes de ser retirada de antena, 6 más de lo que debería.
The Mayor (ABC)
De ser uno de los pilotos más prometedores a terminar desplazada a Hulu después del parón de Navidad. The Mayor no fue una adelantada a su tiempo, fue una víctima del mismo. La saturación de mensajes políticos y el bombardeo anti-Trump pasó factura a esta comedia con encanto pero desacierto a la hora de equilibrar entretenimiento y propaganda. Nadie va a reinventar Veep y nadie va a salvar este género hasta las siguientes elecciones. Ya hemos roto los vampiros, los zombies y los alcaldes. Que pase el siguiente.
Ten Days in the Valley (ABC)
Y la plusmarca del año, señoras y señores, se la lleva Kyra Sedgwick. A veces el chiste es tan fácil que da pena hacerlo, pero no se puede dejar pasar: imaginad lo mala que era Ten Days in the Valley que sólo duró cuatro. La historia del secuestro de la hija de una productora de televisión podía haber sido entretenida, salvo porque la hemos visto sábado sí y sábado también los últimos 20 años en Antena 3 después de comer. Los seis episodios restantes fueron fusilados de dos en dos durante el parón navideño. Dinero bien invertido, sí, señor.
Inhumans (ABC)
No por nada coronó sin duda alguna nuestra lista de las peores series de 2017. Aunque no se le puede considerar un epic fail como tal porque aguantó más o menos estoicamente su emisión del tirón, cuando hablamos de la ponzoña de esta temporada no podemos dejar pasar Inhumans. La decadencia de la marca Marvel se hacía patente no después de Iron Fisting, sino ese trágico septiembre en ABC. Se la intentó cebar como la primera serie que iba a ser estrenada en IMAX. Y así fue. Dos semanas en cartel y luego debut en televisión. ¿Quién podía prever un mojón de audiencia cuando algo ya lleva 2 semanas siendo exhibido? ¡¿Quién?!
Os dejamos los repasos de años pasados, por si queréis jugar a ver cuántas series han sido olvidadas ya y con cuáles va a haber que usar aguarrás.
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