Las 10 peores series de 2021

Ya está aquí la lista en la que nos permitimos meter cizaña y sacar los colores a todas aquellas producciones que nos han decepcionado durante el año. Series que nos han aburrido, que nos han resultado decepcionantes o que directamente nos han dado ganas de arrancarnos los ojos. 

Porque está muy bien compartir la canción que has escuchado en bucle en Spotify, enseñar tu reading challenge de Goodreads o ver cuáles han sido tus actores fetiche en Letterboxd. Pero nunca nos paramos a destacar todo lo que hemos odiado. ¿Por qué no gastar un poquito de nuestro tiempo en evitar que otras personas sufran lo mismo que hemos sufrido? De hecho, si nos apuráis, con esta lista prestamos un servicio más que saludable. Estamos aquí para evitaros el sufrimiento de ver las que nos han parecido las 10 series más flojas de 2021.

10. La Rueda del Tiempo (Prime Video)

La Rueda del Tiempo tiene un aura extraña que no nos deja disfrutarla del todo. Quizás una producción de sus características, con su presupuesto y con Rosamund Pike liderando nos hacía esperar algo con mayor calidad. La serie entretiene pero no creemos que deba conformarse solo con eso. La Rueda del Tiempo luce serie fantástica de The CW con estética de serie básica de Netflix. Como la serie tampoco tiene la culpa de nuestras expectativas, simplemente le otorgamos un discreto décimo puesto.

9. The Falcon and the Winter Soldier (Disney+)

A veces no hace falta que la serie sea muy mala para que nos deje un sabor agridulce. The Falcon and the Winter Soldier parece no coger ritmo nunca. Al final de Endgame, el Capitán América elegía a Sam como su sucesor y las seis horas de serie es lo que ha tardado Falcon en decir que sí. Lo único que parece hacer bien la serie es establecer a los secundarios (US Agent, Sharon Carter y Zemo) para que puedan seguir saliendo de aquí en adelante, pero ha sido lo más flojo de Marvel del año con diferencia.

8. Fate: The Winx Saga (Netflix)

Esta entrada en la lista me escuece un poquito. Fate: The Winx Saga es uno de mis guilty pleasures del año, pero tratando de ser objetivos, la serie deja mucho que desear. Quizás ha querido tomarse demasiado en serio al quitar las partes que hacían especial a la serie original. Falta purpurina, falta el toque mamarracho que esperábamos de una serie de hadas. La versión de Netflix no deja de ser una historia más de una escuela para teens con poderes, parece que la sombra de Chilling Adventures of Sabrina les ha afectado mucho.

7. American Horror Story: Double Feature (FX)

La décima entrega de la serie antológica de American Horror Story ha pecado de pretenciosa. Si abordar una única historia no les suele salir muy bien por su inherente capacidad de perder el rumbo, intentarlo con dos tramas diferentes no les ha salido mucho mejor. En la primera de ellas, unos artistas faltos de inspiración se convierten en chupasangres después de volverse adictos a unas "pastillas de inspiración". En las segunda parte, vuelven a fallar intentando introducir a los extraterrestres en el universo de AHS. ¿De verdad es la misma serie que nos dejó Asylum, Murder House o incluso Coven?

6. Jaguar (Netflix)

España. Años 60. Unos cuantos nazis se refugian entre nosotros. Pero nadie olvida, y menos Blanca Suárez, que sobrevivió al campo de concentración de Mauthausen. Jaguar, que así se apoda Suárez, se une a un grupo de investigadores clandestinos que tratan de localizar y eliminar a todos esos nazis. La serie trata de mostrarse inteligente y enrevesada pero le falta ritmo, fuerza y sentido. No te sientes motivado por la historia en ningún momento, y eso que la premisa, a priori, tenía potencial.

5. The Walking Dead: World Beyond (AMC)

El spin-off malo de The Walking Dead ha mejorado con respecto a la anterior campaña, pero ha terminado cometiendo los mismos errores que la pasada. Los secundarios están desaprovechados, las interpretaciones se cogen con pinzas y el conflicto principal no se ha podido casi explotar porque para algo están las películas de Andrew Lincoln. Una pena. 

4. La Monja Guerrera (Netflix)

La Monja Guerrera no es que sea especialmente horrible, pero lo que le pasa es que es muy básica, muy simple. Está hecha repasada con papel cebolla de otras muchas series del género. Cuenta la historia de una pobre desdichada que está destinada a algo grande. Pero claro, al principio no está muy por la labor, porque la pobre no se cree especial. Pasan entonces a dormirnos durante la primera mitad de la temporada mientras tratan de que nos caiga bien la protagonista. Para lograrlo, nos cuentan sus penurias como si estuviésemos en una audición a ciegas de The Voice. Y una vez terminas la serie te quedas con la sensación de alivio por haber llegado al final, pero no has sacado nada de ella.

3. Sex/Life (Netflix)

Sex/Life es un culebrón poco original en el que tratan de enganchar a la audiencia con mucho sexo y gente guapa. De hecho, se ha hablado más del pito de Adam Demos en el minuto 19:50 del tercer capítulo que de la serie en sí. Verlo se convirtió en reto viral de TikTok, motivo seguro por el que la serie ha tenido tanta audiencia. Recordad que a Netflix le bastaban dos minutos para contarte como espectador.

2. Nine Perfect Strangers (Prime Video)

La medalla de plata se la lleva una serie que pintaba bien pero que ha terminado siendo un auténtico sinsentido. Teníamos como base una novela de la autora de Big Little Lies y un reparto potente encabezado por Nicole Kidman y Melissa McCarthy. Pero hemos terminado atragantados con tanto smoothy y tanta irrelevancia. Si queremos ver a ricos blancos sufrir, este año hemos tenido alternativas mucho mejores, como por ejemplo, The White Lotus.  

1. Jupiter's Legacy (Netflix)

Y la serie que se lleva el honor de ser nuestra peor del año es Jupiter's Legacy. Una producción con 200 millones de presupuesto que Netflix fulminó solo un mes después de su estreno. La plataforma pretendía construir un universo audiovisual parecido al del MCU o incluso a menor escala como The Boys, pero la leche que se han dado ha sido tan bestia que lo único que les ha quedado hacer es camuflarlo con spin-offs animados y parches varios.