La temporada 2011-2012 se está acabando, y no podríamos olvidarnos de las cuatro grandes comedias de la NBC, que tanto nos gustan y tan poca atención hemos prestado. Por ello, os presentamos ahora nuestra crítica de sus últimas temporadas y de sus finales, para que no se os quede nada en el tintero.
Parks and Recreation, rozando la perfección
Cuando se estrenó Parks and Recreation hace ya cuatro temporadas, supongo que muy pocas personas creyeron que la que fuera una comedia incluso demasiado pobre y extraña para la NBC acabaría por convertirse en una de las mejores series cómicas de la televisión. Y no solo eso, sino que a la cuarta temporada de Parks no se le puede reprochar nada, salvo quizás no darle a Donna (Retta) el protagonismo que se merece. Quizás no haga los datos de audiencia que debería, ni que sea una comedia para todos los gustos, pero nadie puede negar que la serie protagonizada por Amy Poehler ha llegado a unos niveles de grandeza totalmente inesperados. El que el ascenso político de la genial Leslie Knope —es decir, la cuarta temporada completa— se haya establecido en base a un guión en el que toda escena homenajea a la propia serie y a su historia, con un humor soberbio y unos personajes muy cuidados, demuestra que Knope y los chicos del Departamento de Pawnee todavía tienen mucho que decir. Cierto es que en realidad si se le pueden reprochar cosas, como la evolución de ciertos personajes, como Ann y Tom, que finalmente comienzan una relación asimétrica, divertida pero muy confusa para el espectador; o April, que de repente descubre que tiene un corazón y unos sentimientos que desprecia; pero la cuarta temporada de Parks and Recreation te deja con un magnífico sabor de boca y con ganas de que llegue de una vez septiembre para volverle a hincar el diente.
Y nos espera Leslie Knope como una de los altos cargos de Pawnee. ¿Cómo hará la entusiasta política para mantener a sus amigos, a su novio y a su ciudad al mismo tiempo? Creo que la serie comenzará una nueva dinámica muy interesante y con toda seguridad divertida, así que preparaos para soltar una carcajada porque Leslie Knope y los suyos volverán a darnos guerra. YAY Pawnee!
Liz Lemon y las plantas
En 30 Rock han cambiado muchas cosas a lo largo de las temporadas, pero creo que una de las más estáticas ha sido Liz Lemon. El genial personaje interpretado por Tina Fey ha demostrado ser el modelo de un tipo de mujer al que no le importan comer calorías, ver más a la tele que a sus amigos —si es que tiene— y vestir como le dé la gana. Pero aunque todo eso siga vigente en su vida, algo tenía que cambiar, pues una nueva necesidad aparece para darle un vuelco a su vida... tener o adoptar a una planta. Y si bien, como imagináis, la planta es una metáfora, los cambios en la vida de Liz no lo son, y ahora que tiene a Criss (James Marsden) a su lado, siente que necesita dar ese paso. Al igual que lo hizo Tina Fey en su día, Liz Lemon podría acabar teniendo un bebé en la séptima y última temporada de la serie, lo que sin duda cumpliria en parte con el destino de la misma.
Si bien la sexta temporada se ha olvidado relativamente de la relación de mentor-alumna entre Jack y Liz, la verdad es que Jack Donaghy ha estado muy ocupado lidiando con sus propios asuntos. El secuestro de Avery (Elizabeth Banks) ha llevado a su vida a su suegra, Diana (Mary Steenburgen), hacia la que se siente muy atraido. La culpa y el encubrimiento de su crimen han sido los principales temas de Jack esta temporada, aunque los acaba resolviendo muy bien. Por otro lado, el resto de personajes han seguido dando la nota como siempre, como Jenna, Tracy y Kenneth, mientras la sexta temporada se desarrollaba con la grandeza e inteligencia de siempre, sus referencias diabólicas y su humor brillante. ¿Qué nos deparará la última temporada? ¿y qué haremos sin Liz Lemon?
Community, lejos de seis temporadas y una película
Community puede presumir de muchas cosas, como de ofrecer los episodios cómicos más locos e inesperados de toda la televisión, pero del mismo modo es culpable de cometer uno de los mayores errores que se le pueden achacar a una comedia como esta: ser excesivamente irregular. Su tercera temporada, especialmente, se ha caracterizado por alternar con demasiada frecuencia la genialidad y la decepción y eso, entre otras cosas, ha sido la protagonista de sus bajas audiencias, a pesar de su poderoso fandom. Además, que sea tan difícil acercarse a la serie por primera vez también ha complicado las cosas. Sea como fuere, los chicos de Greendale tienen todavía una temporada —de momento, aunque la marcha de Dan Harmon augura que no pasará de ahí— para redimirse o para seguir sorprendiéndonos, y esperemos que lo hagan sin perder su magia.
La tercera, en general, me ha parecido una temporada muy divertida y que ha explotado con mayor profundidad e inteligencia, así como con la excentricidad que la caracteriza, las peculiaridades de la amistad y de las relaciones sociales. El famoso grupo de estudio de Greendale se ha tambaleado por primera vez y hemos visto cómo las enemistades han surgido entre ellos, destacando la de Troy y Abed, representada a través de una particular guerra de almohadas; mientras, el resto de personajes han vivido la evolución más clara desde los comienzos de la serie, con desiguales consecuencias —no olvidemos a Britta ejerciendo de psiquiatra, a Jeff tratando de superar su egocentrismo o a Chang alzarse contra sus antiguos amigos—. En definitiva, esta tercera temporada nos ha dejado episodios para el recuerdo (Remedial Chaos Theory) así como tramas para olvidar, pero en conjunto el balance es tremendamente positivo. No perdamos nuestras esperanzas y esperemos que el futuro de Community sea tan brillante como su potencial.
The Office, la superviviente
The Office, por su parte, se ha despedido con un capítulo en general divertido que, sin embargo y como nos han acostumbrado en la octava temporada, ha tenido momentos muy inspirados y otros muy mediocres.
Como siempre, el cold opening ha sido muy ocurrente y acertado, así como todas las tramas secundarias que, sin duda, han salvado el capítulo: Dwight recogiendo pruebas de ADN del hijo de Ángela para comprobar que es el padre biológico, el genial momento de la persecusión en coche —con la siempre bienvenida aparición especial de Mose Schrute— o la paranoia de Jim por las posibles represalias de Dwight también ha sido divertida. El momento tierno del capítulo ha tenido como protagonistas a Darryl y Val, que no han tenido mucho protagonismo en toda la temporada pero, sin embargo, los guionistas han manjeado muy bien su pequeña historia de amor. El colofón final con la resolución de si el senador Lipton es gay o no ha sido también de los momento más divertidos del episodio.
Por otra parte, la trama principal con Andy y su vuelta a Dunder Mifflin ha sido lo peor del episodio, repetitiva, aburrida y pesada. Aunque algo bueno nos ha traido: la salida definitiva de la serie de Robert California, un personaje que nunca ha terminado de funcionar y que, personalmente, no echaré de menos.
Sin su show runner de los último años, Paul Lieberstein, The Office ha sido renovada por una novena temporada que se enfrenta a la salida de algunos de sus actores y aunque nunca será como en sus primeros años es posible que aún haya esperanza para esta serie, una de las pocas que quedan de la cosecha de la temporada 2004-2005.
Gran post, aunque no este muy de acuerdo. Parks ha tenido una gran temporada, aunque para mi inferior a la tercera y lejos de la perfección. La trama de Ann y Tom me ha parecido malisima, Ann siempre sera una sosa y Tom ha pasado de ser gracioso a ser lamentable, la trama de las elecciones de Leslie se me ha llegado a hacer repetitiva, todos los capitulos eran iguales, a Leslie se le presentaba un problema que la hacia perder popularidad pero al final siempre conseguía superarlo... Y lo peor de todo ha sido la baja aportación del gran Ron Swanson. En lo bueno, Chris ha mejorado, Andy sigue siendo un grande, el pobre Jerry, y el "universo" de Pawnne. The office nos has ofrecido su peor temporada de laaargo, y Community ha estado inmensa, yo no le veo la irregularidad por ningun lado como mucha gente opina, cuestión de gustos.
ResponderEliminarA mí la cuarta temporada de Parks me ha parecido sublime, especialmente el tema de las elecciones. No obstante, como dice Anónimo algunos personajes no me han llegado a convencer con sus cambios, pues no es como deberían ser en un principio.
ResponderEliminarTambién estoy de acuerdo en lo de la irregularidad de Community, aunque sí es cierto que en cnjunto la temporada haya sido muy buena.