La quinta
temporada de True Blood ha llegado a su fin con un final bueno, pero lejos de
ser alucinante. El cliffhanger que nos han proporcionado no es nada del otro
mundo, pero sí han cumplido con su palabra cuando dijeron que habría mucha
sangre; en realidad, litros de sangre. Si hay algo que destacar del episodio,
sería el momento Tara-Pam que muchos esperábamos desde el principio de
temporada. Hasta el próximo verano.
Rescates
En esta
season finale nos hemos encontrado con dos rescates: el de Jessica y Pam, y el
de Emma. Hablemos del primero: las hadas estaban en peligro porque Russell había
encontrado su escondite e iba a darse un festín, pero en el último momento
aparece Eric siguiendo el rastro de Sookie y acaba con la vida de Russell. En
ese momento, Sookie acude al lado de su inconsciente hermano para llevarse la
sorpresa que al despertar, no para de ver a sus padres muertos que le dicen lo
despreciables que son los vampiros. Eric y Nora necesitan la ayuda de Sookie
para que Bill vuelva a entrar en razón, y como es normal Jason no le dejará
sola con los despreciables vampiros. Además, Tara acudirá con ellos al rescate
de su creadora. Una vez en la sede de la Autoridad, empieza la acción y el
abuso de sangre. Matan a todo vampiro con el que se cruzan mientras van al
rescate de Jessica y Pam. ¿Cuál es la reacción de Tara y Pam al volver a estar
juntas? Un apasionado beso entre las vampiresas. En cambio, Jessica no tiene
tanta suerte con Jason, quien reniega de ella por ser un vampiro. Por último,
mientras el resto huyen, Eric y Sookie se quedan para intentar cambiar a Bill.
El segundo
rescate es el de la pequeña licántropa. En el episodio anterior, descubrieron a
Sam y a Luna y les encerraron pensando que eran otros simples prisioneros. Sam
aprovechó que Bill quería alimentarse para ir a su encuentro y pedirle ayuda,
pero se encuentra con un Bill dispuesto a matarle tras negarle la ayuda.
Evidentemente, Sam se lo va a poner difícil y más cuando todavía no han recuperado
a Emma, y se transforma en una mosca para ir al encuentro de Luna. Poco
después, a Sam se le ocurre una idea: Luna puede transformarse en el reverendo
Newlin para conseguir escapar junto a Emma. Pero todo puede salir mal, y más
cuando obligan al falso Newlin a dar un comunicado en plena televisión para
desmentir el video real de la masacre universitaria. En pleno comunicado, Luna
no aguanta más y vuelve a su forma real, y para salvarla de la loca canciller,
Sam se mete en la boca de la vampira y se transforma en humano reventando a la
vampiresa.
Traición
¿Qué pasa
con Bill? Sabemos que Lilith se le apareció diciendo que él era el elegido y la
locura hizo que terminara con la vida de uno de sus compañeros. Evidentemente,
Bill sabe que quién le dará problemas para conseguir su objetivo es Salomé, y
por ello, Bill será el sujeto que protagonice la traición del episodio. Resulta
que a Salomé le dice que mató a su compañero porque Lilith se le presentó
diciendo que había elegido a Salomé como la profeta y que ella debe de beber el
resto de sangre. Dicha revelación, hace que las ansias de Salomé crezcan y no
se dé cuenta de que Bill ha cambiado la sangre de Lilith por otra llena de
plata. Bill aprovechará la debilidad causada por la plata para acabar con la
vida de su compañera y amante. Antes de beber la verdadera sangre de Lilith,
Eric y Sookie aparecen para intentar detenerle, pero no lo consiguen. La sangre
de Lilith acaba con la vida de Bill, pero como si se tratara de un ave fénix,
un Bill más malvado aparece de sus restos.
Guerra Final por la Manada
Alcide y su
padre reciben la visita de la madre del fallecido Marcus, quien trae a una
histérica Rikki. El líder de la manada ha estado obligando a la manada a tomar “V”
a la fuerza y Rikki necesita ayuda. Para ello, el padre de Alcide le
proporciona un líquido que hace que el “V” sea expulsado a través del sudor. La
situación se ha convertido en intolerable, y por eso Alcide se decide poner
punto y final. Hay un problema, y es que el enemigo no para de tomar “V”
teniendo ventaja, y por ello su padre le proporciona “V” de un vampiro inferior
para estar a la altura. Y es así como acude a la manada y entra en una lucha
con el líder, acabando con su vida y proclamándose en el nuevo líder. Primera
regla de la nueva manada: prohibido el “V”.
Nuevos Habitantes en Bon Temps
Sí, hay
nuevos habitantes en Bon Temps, y ¿de quién se trata? de las hijas del
sheriff. El hada con el que tuvo un rápido affaire se quedó embarazada, y el
deber de Andy es cuidar del bebé. Así es, es su deber, ya que el hada ya
proporcionó “la luz” y ella ya no puede
hacer nada más tras el parto. Un embarazo raro de una semana que acaba con un
parto peculiar (en vez de dolor parece que produce orgasmos) dando luz a cuatro
niñas. Quién se lleva la peor parte es la novia de Andy, que no sólo se entera
de que le ha sido infiel, sino que encima tiene que asistir ella el parto.
Pues no ha estado mal, pero lo del "I didn't see that coming" tampoco creo que sea verdad: lo de Pam y Tara era de cajón, y sabíamos que lo de la Autoridad iba a acabar mal.
ResponderEliminarPor otro lado, espero que el tema de los licántropos haya encontrado aquí su final porque aunque no ha acabado del todo mal ha sido un aburrimiento hasta aquí.
No me convencen los cliffhangers ni las cosas que han dejado abiertas como lo del nuevo Jason (?) o los hijos de Andy. Pero me alegro que por fin True Blood parezca regresar más o menos a sus orígenes con la reunión de Sookie, Bill y Eric.
A mi me ha gustado el capítulo, no ha sido una temporada triunfal pero ha seguido una linea dentro de lo correcto y sin demasiadas idas de olla de las que tienen los guionistas de esta serie.
ResponderEliminarLos capítulos finales han sido entretenidos y el final aunque no brillante ha estado bien.
Tara y Pam también son mis favoritas, aunque también me gusta el rollo de Jessica y como nuevo personaje creo que la hermana de Eric va a triunfar.
Russel y el reverendo me chiflan y en esta temporada han estado también muy muy divertidos, a ver que pasa con el pobre reverendo en la siguiente temporada...habrá que esperar hasta el verano que viene.