“GLIDING o’er all, through all,
Through Nature, Time, and Space,
As a ship on the waters advancing,
The voyage of the soul–not life alone,
Death, many deaths I’ll sing.”
Leaves of Grass, de Walt Whitman
Primero quiero deciros que recojo el testigo de Torllo para hacer esta review, ya que nuestro compañero no podía escribir esta semana. Es un gran honor, pero reconozco humildemente que su nivel no se alcanza fácilmente. Así que, amigos lectores, empecemos.
Desde el inicio de esta temporada sabíamos que Breaking bad iba a dividir su temporada en dos partes, emitiéndose la segunda parte el verano de 2013. Esta quinta temporada ha sido impresionante. Desde la primera temporada observamos el camino sin retorno hacia la oscuridad de Walter White, encarnado en su álter ego, Heisenberg.
El "oscuro pasajero" no pertenece exclusivamente a Dexter. Walter White ES el oscuro pasajero. Reconozco que hasta este año he estado al lado de Walter White, entendí cómo y porqué se metió en el mundo de la metanfetamina. Entendí, incluso, alguna de las muertes que ha ido dejando a lo largo de estos cinco años. Hasta la muerte de Mike: en ese momento vi el auténtico abismo de Walter. Porque ya no es Heisenberg. Es Walter White, directamente.
El título de este capítulo corresponde a un poema de Walt Whitman que tiene una importancia capital ya que, posiblemente, sea el principio del fin de nuestro cocinero. Este último episodio de la quinta temporada es una gozada visual. El encadenamiento de imágenes y su acompañamiento musical es como un poema visual. Destaco dos escenas. La primera es cuando, después de conocer al tío de Todd (aquel que tiene contactos en la cárcel), asesinan a los trabajadores de Mike, aquellos que pueden incriminarlos. Todo al ritmo de Pick yourself up, de Nat King Cole. Impresionante. La segunda es la secuencia de imágenes de Walter y Todd cocinando, empaquetando, enviando la droga y acumulando dinero, viendo en todas las casas que van trabajando, acompañado de la sintonía de Persuasion crystal blue, de Tommy James & The Shondells.
Todd
Todd ha asumido el rol de Jesse, pero tiene menos dilemas morales, cosa que asumo le gusta a Walter. Así, es el que se encarga de hacer desparecer el coche, y el cuerpo, de Mike. Desde el momento en que mata al niño hace ya un par de episodios, vemos que Todd es un Heisenberg en potencia, aunque quizá sin la inteligencia de Walter. Porque Walter nos podrá gustar más o menos, pero no podemos negar su inteligencia. ¿Será Todd el heredero de Walter?
Skyler
En un momento dado, Skyler le pide a un Walt taciturno, sentado en la oscuridad de la noche, al lado de la piscina, que le acompañe a un lugar. Le lleva a un almacén que ha alquilado para guardar todo el dinero acumulado, todo el dinero que ya no puede contar ni pesar... y le pregunta cuándo será bastante. En el centro del almacén vemos una pila enorme de billetes. Enorme. Incontable. Y es que el negocio que ha hecho con Lydia (quien le ha facilitado los nombres de los presos y le ha propuesto el nupara enviar su "producto" a la República Checa a través de la logística de Madrigal está yendo viento en popa. Maletas y maletas de dinero. Cuando Walter observa tal acumulación de dinero, su rostro deja entrever sorpresa.
Jesse
Jesse se ha desvinculado del negocio, pero acude a la sede de Vámonos Pest para hablar con Walter sobre Mike, quien se "ha ido", le indica. Jesse necesita saber qué van a hacer ahora con los que están presos, a lo que Walt le contesta que no hay un "nosotros", que él se encargará de arreglarlo. Por eso, cuando Walt acude a visitarlo, después de acudir a una revisión médica (¿habrá salido bien?), Jesse abre la puerta de su casa asustado, a pesar de tener escondida una pistola. Otra escena curiosa y significativa. Walt se pone a rememorar sus inicios en la caravana, con un Jesse entre expectante y sorprendido. Tras esta breve charla, se marcha, dejando en la puerta dos bolsas llenas de dinero. Walt regresa a su casa y le dice a Skyler que lo ha dejado. "I'm out".
Hank
La DEA está convencida de que podrá obtener las confesiones de los colaboradores de Mike Ehrmantraut, hasta que les llega la noticia de la matanza en la cárcel. Hank regresa a su casa abatido, donde se encuentra con Walter, que está visitando a sus hijos. Hank le confiesa que echa de menos aquel trabajo de verano que tenía cuando era joven, en el que marcaba los árboles que debían ser talados. Hank está cansado de perseguir monstruos. Qué tremenda ironía: el monstruo está en su casa. Poco después vemos a las dos parejas, Walter-Skyler y Hank-Marie, disfrutando de una cena en casa de los White. En un momento dado, Hank tiene que ir al baño y allí, buscando algo que leer, descubre el libro de Walt Whitman, Leaves of grass, con una dedicatoria escrita a mano:
To my other favorite W.W.
It's an honour working with you.
Fondly,
G.B.
Sí, esa letra le suena. Y una cascada de recuerdos asaltan la memoria de Hank... Una conversación que tuvo con Walter sobre el caso Heisenberg y una libreta que habían encontrado (que era de Gale Boetticher. Tuvo lugar en la tercera temporada: S03E06)). ESA letra.
Hank se ha dado cuenta: Heisenberg es Walter White (W.W.)
Nos toca espera hasta el año que viene para ver el desenlace. ¿Recordáis el primer episodio de esta temporada? Walter celebrando su 52 cumpleaños en un bar, solo. ¿Huirá? ¿El cáncer habrá vuelto? Mucho tiempo de espera para tanta ansia...
Lo siento, no me ha gustado. El episodio ha estado técnicamente muy bien pero no me creo, después de todo lo que ha pasado, que Walter acceda a retirarse del negocio porque "no tiene dónde blanquear todo el dinero que gana". A Walter le da igual el dinero. Él quiere ser un hombre temible que haga temblar a todos los que oigan su nombre. No le importa el dinero. Ya no.
ResponderEliminarY después, que Hank se dé cuenta de que Walter es el monstruo que persigue mientras planta un pino... pues no sé qué deciros, pero es pura elegancia.
Hola! yo no lo entiendo así. El que quería ser un hombre temible era Heissenberg no Walter, Walter era el tío normal del principio, lo que pasa es que Walter desapareció en el momento de la risa histérica y, en mi opinión, no volvió a aparecer tímidamente hasta que mata a Mike y empieza a darse cuenta de a donde le está llevando esa actitud (al fin y al cabo yo creo que a Mike le tenía aprecio y respeto).
ResponderEliminarY lo de Hank no sé, supongo que será una forma de demostrar que siempre hay algo que se te pasa por alto, aunque sea una cosa banal.
Lo que quiero decir es que me sigue pareciendo una serie magnífica y será siendo mi favorita :)
Tampoco creo que Walter lo deje. No es una cuestión monetaria. Estamos hablando de poder, ahora bien, nos dejan colgados hasta la próxima temporada con la duda. Además, a mi me dejó intrigada el TAC que le hacen, ese ver el contenedor de toallas del baño golpeado (él lo golpea cuando se entera de que tiene cáncer)... Me da que la enfermedad vuelve a aparecer. We'll see...
ResponderEliminarSé, ha sido un poco raruno. Es cierto que el matar a Mike por despecho puro y duro le sorprendió hasta a él. Pero también lo es el que hace ya mucho tiempo que Walter no da un duro por su familia, así que el que Skyler le llore una vez más le debería entrar por una oreja y salir por la otra. Eso sí, el descubrimiento de Hank, elegante por supuesto que no, pero me parece muy significativo. Que el calculador Walter White cometa un error tan burdo como conservar una prueba que el propio Hank ya le había comentado hace dos temporadas es delirante. Siempre se cometen errores, y siempre suelen ser patéticos. Después del desmantelamiento de cero escrúpulos cargándose de la forma más animal a los tíos de la cárcel, Walter caerá porque no pensó en la posibilidad de que su cuñado, que frecuenta la casa con mucha regularidad, fuera a cagar a su baño.
ResponderEliminarPues me río en tu cara, Walter White.
El golpea el Dispenser cuando se entera que el Cancer, esta en Remision.
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