Quién le iba a decir hace unos años a History Channel que daría un braguetazo televisivo justo cuando la demanda es más (absurdamente) amplia que nunca. De aquellos documentales sobre la II Guerra Mundial que veía un deprimido Tony Soprano mientras devoraba calorías hasta el estreno de Vikings y The Bible (de la que os hablamos el otro día) ha pasado mucho tiempo, pero justo el suficiente para que el canal utilizara esa infravalorada programación durante dos décadas para testar a su audiencia y saber qué es lo que buscan ver, todo ello sin mucho riesgo. Todo esto lo dice el director de programación de la cadena, Dirk Hoogstra, con una sonrisa malévola en los labios.
Y es que la razón de ser de Vikings, obviamente, no es casual: durante este tiempo los documentales sobre vikingos que History ha emitido han tenido buena acogida, y a la hora de plantearse un enfrentamiento en la guerra de ficciones esta experiencia ha sido toda una ventaja. Y aunque es cierto que Vikings no ha pegado tan fuerte como The Bible (tan "solo" 6,21 millones), lo cierto es que su mérito ha sido más que evidente, teniendo en cuenta que no ha contado con el respaldo de los sectores religiosos estadounidenses.
¿A favor? Vikings cuenta con una historia con mucha garra; con un reparto variado, aceptable y funcional; y suponemos que es históricamente verídica viniendo de quien viene. Además no se corta con la violencia o el sexo, aunque tampoco ofrece más de lo necesario. Y bueno, tiene vikingos.
Sus dos primeros episodios son bastante notables (el segundo se emitió anoche pero lleva unos días filtrado) y anuncia unas tramas simples pero enérgicas que tienen mucho potencial, en las que seguiremos a la legendaria figura vikinga de Ragnar Logbrok (interpretado por el otrora forro de carpetas Travis Fimmel), un intrépido héroe que desea cruzar los mares con una nueva generación de barcos, bajo peligro de enojar a su señor Jarl Haraldson (interpretado por un Gabriel Byrne algo fuera de lugar), un hombre temeroso de perder su posición y con muy poca visión. A ellos les acompañan el heramno de Ragnar, Rollo (Clive Standen, Camelot), su guerrera esposa Lagertha (que no Laguerta, interpretada or Katheryn Winnick), el constructor de barcos Floki (Gustaf Skargard) o Siggy, la esposa de Jarl (una irreconocible Jessalyn Gilsig).
Aunque su frase promocional Storm is coming produce un par de arcadas por el morro que tiene, lo cierto es que lo que más se agradece de Vikings es que no cae presa de su propia ambición y promete justo lo que ofrece: vikingos, hachas y barbas, y todo lo que ello implica. No es Spartacus ni es Rome, pero es más que suficiente. La primera serie de ficción de History todavía tiene mucho que demostrar pero supera con creces su primera prueba. Échale un vistazo y luego pásate por aquí para dejar tu opinión.
Lo del Storm is Coming es un canteo claro jajajajaja yo tengo que verla, definitivamente! es del tipo que puede gustarme y hay que dar oportunidades. Gracias por la information!!
ResponderEliminarLe falta coger ritmo pero te va a gustar seguramente. Especialmente Lagertha :)
ResponderEliminarAlguien sabe alguna pagina para verla ya que esta restringida a amerca latina
ResponderEliminarEstoy seguro de que si buscas en Google lo encontrarás :)
ResponderEliminar