Hierro. Litio. Sodio.
Sangre. Metanfetamina. Lágrimas.
Final.
Paz. Ese es el sentimiento que impera sobre todos los demás cuando acabas de ver Felina, el último episodio de Breaking Bad. Porque no puede ser otro: no hay decepción, no hay felicidad, no hay tristeza —bueno, eso sí, pero por motivos obvios—, tan solo la sensación de que hemos llegado al final de una aventura con la certeza de que todos los cabos han sido atados, y que solo nos queda dar un gran suspiro y aplaudir a un equipo que nos ha demostrado que la televisión puede significar otra cosa. Algo grande y magnífico.
Porque los finales son para despedirse.
Vince Gilligan, creador de la serie así como director y escritor del último episodio, lloró escribiendo Felina, y quiero creer que lo hizo pensando en todos nosotros. Nos ha ofrecido un final complaciente aunque desgarrador y emotivo. Por mi parte no ha habido lágrimas, pero sí entendimiento y admiración. Un trabajo bien hecho, a la altura de la trayectoria de Breaking Bad: inmenso.
Y yo solo puedo dar las gracias.
"I did it for me. I liked it. I was good at it. An I was really... I was alive"
Es necesario entender estas frases porque lo significan todo, absolutamente todo. Muchas veces he escrito sobre ello y podréis comprender que para mí estas palabras hayan sido lo más relevante del episodio, de lejos. ¿Cuál ha sido siempre la motivación de Walter White? ¿por qué ha hecho las cosas que ha hecho? Skyler, en una escena que merece otro Emmy para Anna Gunn, le dice a su marido en su última visita que no quiere volver a oír hablar de que todo lo que ha hecho Heisenberg ha sido por su familia —recordemos el "Alguien tiene que proteger a esta familia del hombre que protege a esta familia"—, y Walter o Heisenberg, poco importa ya, le dice estas demoledoras palabras.
Porque es cierto que la familia le importa. Es verdad que entre sus motivaciones está la de protegerlos. Eso es indiscutible, pero no es absoluto. Walter White es un hombre construido sobre la ambición, y por primera vez reconoce abiertamente que su trayectoria ha sido movida por ese sentimiento. E incluso sigue siendo el sentimiento, o el instinto, que mueve los últimos hilos de la serie. Siendo Heiseberg se sentía poderoso, sentía que podía controlarlo todo y que la vida le estaba dando una segunda oportunidad. ¿Cómo iba a rechazar ese poder? ¿cómo no iba a disfrutarlo?
Walter visita a su compungida esposa, como todo lo que ha hecho en el episodio, con ánimo de despedida. "Todo ha acabado y necesito una despedida apropiada", dice. Ambos saben que no se van a volver a ver, pero poco importa: no hay nada más que se puedan decir. Su regalo de despedida son unos números, esas coordenadas que indican dónde estaba enterrado el dinero y, por ende, dónde están enterrados los cadáveres de Hank y Steve Gomez. Eso le dará una oportunidad a Skyler para que negocie con el fiscal y pueda salvarse de la cárcel.
Pero no es el último gesto para con su familia. El dinero, desde el comienzo de la serie, ha sido fundamental, y aunque Walter engañe a Skyler diciendo que no le queda nada —simplemente porque ella no quiere saber nada del dinero de la droga—, se asegura de que su familia vaya a recibir esos casi 10 millones de dólares que le dio su Imperio. Creíamos que la ambición de Walter, palpable en esa mirada heisenbergiana hacia la televisión, acabaría en una sangrienta escena con Gretchen y Elliott Schwartz, pero finalmente el chejov se resolvió con nuestro químico apelando a ellos para que le den a Walter Jr el dinero cuando cumpla 18 años, en forma de depósito como víctima de la droga. Gran giro con momentos de infarto y una tensión que nos ha puesto los pelos de punta —y gran aparición de Badger y Skinny Pete—.
Aplausos.
"Say the words. Say you want this. Nothing happens until I hear you say it"
Walter White regresó a Nuevo Méjico para morir. Eso lo sabíamos desde hace mucho, pero no sabíamos cómo. No obstante, y a pesar de la terrible situación y los últimos latigazos de su enfermedad, Walter se quiere ir por la puerta grande. Y vaya si lo hace.
Cuando descubre que Jesse se ha "aliado" con la banda de neonazis de Jack y que el negocio de la droga va viento en popa gracias a las proezas de su antiguo alumno, Walter planea una cruzada contra todos aquellos que le han usurpado. Su ambición se vuelve a hacer patente en esta decisión, una que ni ayudará a su familia, ni le salvará la vida ni le librará de la cárcel. Lo que vimos en los anteriores flashforwards no eran más que los planes de Walter para ejecutar su venganza, y tanto los chejovs de la M60 y la ricina serán las armas de las que dispondrá el maestro para lograr sus objetivos.
Le hemos dado vueltas y ni siquiera nos hemos acercado.
La primera en caer es Lydia. La maniática empresaria, presa de sus propias costumbres, caerá en la trampa de Heisenberg cuando acude a una reunión con Todd y Walter se les acerca como un hombre débil y hundido —que en el fondo lo es, aunque le conviene aparentarlo aún más— para pedir una segunda oportunidad. Sabemos, desde el momento en el que Lydia toca los sobres de azúcar y de su preciada stevia, que la ricina estará escondida en uno de ellos, y no nos equivocamos.
Lydia, que de esto nada sabe, cree haber llevado a Walter a una trampa cuando es el químico el que tiene un as en la manga. Hecho un guiñapo, acude al campamento de neonazis para acabar con todos ellos y encontrar a Jesse. Aparca su coche como le da la gana y tiene especial cuidado de tener a mano sus llaves, sin nosotros imaginar el porqué.
Sabe que ha ido allí a morir, pero no se irá sólo a la tumba. Tocando los puntos débiles de Jack diciéndole que es "socio" de Jesse, hará que traigan a su antiguo alumno a su presencia, antes de que le den un tiro en la nuca —lo que nos deja con la duda de si Walter realmente tenía motivos para ir allí solo por rescatar a Jesse, a pesar de todo—. En cuanto le ve, le tira al suelo y aprieta su botón, dejándonos con la boca abierta y un montón de cadáveres a su alrededor, víctimas de la automatizada M60, implacable.
Todos mueren salvo Todd, que es estrangulado por Jesse como acto de venganza por todo lo que ha hecho contra él; y Jack, que recibe un tiro sin ni siquiera poder apelar al dinero que ya no tiene ninguna relevancia.
Y así, Walter y Jesse se pueden mirar a las caras y acabar con todo. Walter, con una mirada que lo dice todo, le ofrece la oportunidad de matarlo, de acabar con él, de ofrecerle esa justicia poética que tanto él como nosotros necesitamos. Como respuesta al famoso "We're done when I say we're done" —y a la conversación de "despedida" entre ambos en Confessions—, Jesse le responde exigiendo que le pida que le mate, pero cuando se da cuenta de que una bala perdida ha tocado a Walter, se larga de ahí dejando a su maestro solo en sus últimos momentos. A su suerte.
Y es al laboratorio, donde todo comenzó —de hecho, lleva prácticamente la misma ropa que en el piloto—, donde Walter va a morir. Rodeado de sus instrumentos, tanto de felicidad como de tortura, Walter da su último suspiro y se despide de nosotros para siempre, quedando en paz con todos.
All Hail to the King. Nunca olvidaremos tu nombre.
Guess I got what I deserved
Kept you waiting there too long, my love
All that time without a word
Didn't know you'd think that I'd forget or I'd regret
The special love I had for you, my baby blue
voy a engañarme ke ya se va estrenar the walking dead y American horror : Coven para no sufrir mas ........ final de altura (chupate esa dexter) ..... excelente todo .... muy buena reseña..... ahora que viene para nosotros un antes y después ...en plena era tecnológica .... gracias Mrs. WHITE AND PINKMAN
ResponderEliminar"Aparca su coche como le da la gana y tiene especial cuidado de tener a mano sus llaves, sin nosotros imaginar el porqué."
ResponderEliminarSe sabia perfectamente lo que hacia, estuvo en el desierto preparando el robot y lo probo con el control de la alarma. Era bastante obvio lo que estaba tramando.
Ay :(, para mi ha sido muy muy muy doloroso el final, y esos últimos segundos, con Walt y sus equipos del laboratorio, MADRE MÍA, lagrimas en mis ojos.
ResponderEliminarPara que les voy a mentir, sigo deprimido por el final, o sea, sabía que Walter iba morir, si no era asesinado su cáncer se lo llevaría, pero igual es una gran pena como murió, sólo, con su familia odiandole y ni siquiera con Jesse a su lado.
Tal vez el único consuelo es que, justamente, todo el mal que ha causado se lo ha llevado también con él a la tumba, y tanto su familia como Jesse al fin dejan de correr peligro y claro, está el otro consuelo, algo que Walter también siempre quiso, dejar dinero para cuando él ya no esté.
En fin, un final que me llevará tiempo superar, R.I.P. Mr. White.
"To my other favorite W.W. It's an honour working with you. Fondly, G.B."
Probablemente con la emoción se le olvidó ese detalle.
ResponderEliminarLa última mirada entre Mr. White hacía Jesse Pinkman fue una conciliación esquisita.
ResponderEliminarDe fondo, escuchamos Baby blue, de Badfinger, la canción perfecta para el final. Walt disfruta una última vez de lo mejor de su vida hasta caer al suelo muerto. La cámara se va alejando al más puro estilo Lost, sólo le faltaba cerrar los ojos. Y así, fue la metanfetamina (Felina) la que lo empezó todo, pero también con la que termina: Walt tuvo lo que se merecía.
ResponderEliminarEs un episodio genial, no os lo voy a negar. El broche de una serie que nos ha enganchado capítulo a capítulo. Y respondiendo a la pregunta con la que inicié el post, sí, es un final digno de Breaking Bad, pero quizás haya podido decepcionar a muchos, en parte hasta a mi. En mi opinión, han faltado algunas últimas buenas escenas, como una despedida decente con Jesse o quizás verlo cocinar una última vez. Y desde luego no podéis negar que desde la muerte de Hank la tensión de la serie disminuyó mucho.
Por ello, aunque repetiré hasta la saciedad que me ha encantado el final y, sobre todo, la temporada, el capítulo no ha conseguido mantener el nivel de Ozymandias, que en mi opinión se corona como el mejor capítulo de la temporada y, por ello, casi lo considero el final real y los dos capítulos restantes una especie de epílogo.
Desgraciadamente, Breaking Bad ha terminado y será muy difícil reemplazarla. We'll miss you, biach.
Si quereis leer mi review completa, aquí teneis http://notodopuedeserlost.blogspot.com.es/2013/09/breaking-bad-felina-series-finale.html
Totalmente de acuerdo. Increíble. En la segunda o tercera temporada, cuando se quedan tirados en el desierto Jesse y Walter, Jesse le dice q construya un robot para sacarles de allí...jaja Resulta que al final si que construye ese "robot" para salvarles!
ResponderEliminarR.I.P. WW. My Star.. My Perfect Silence...... La mejor serie que he
ResponderEliminarvisto hasta este momento... digno de verla nuevamente y nuevamente...
Breaking Bad: esa serie que nos mostró la transformación de un hombre; un hombre del cual sus alumnos se burlaban, aquel al que su jefe no respetaba y aquel al que su familia lo veía como alguien aburrido y falto de carácter. Pero a través de toda la serie; vemos cómo aquel hombre se convierte en un criminal temido que ha matado, engañado y traicionado, todo en afán de "no dejar desprotegida de la familia"... sin darse cuenta que esos mismos actos lo dejaron sin una familia a quien proteger.
ResponderEliminarBreaking Bad siempre mostró a sus protagonistas al filo de muerte y al final, la muerte prevaleció. Murieron personajes, sí; pero también murió el concepto de familia, la confianza, la fe... y el futuro.
Sin embargo, Walter White, al final hizo lo que pudo por limpiar lo que él ensució. Irónico es que, al inicio de la serie, él quería vivir para proteger a su familia... pero al final; él tenía que morir para hacerlo. Al final... demostró que seguía amando a su familia. Al final... demostró que no era un monstruo sino alguien bueno que hizo cosas malas. Al final nos demostró que, aún cuando todo el mundo no te perdone; puedes redimirte en cierta forma, y llegar al final con la frente en alto y con una sonrisa que demuestre paz interior.
La serie termina como pocas: dejándonos con un nudo en la garganta pero satisfechos de saber que "todo lo malo... tiene un final".
Oh Walter White... yo sabía que harías algo bueno y genial con esa M60.
ResponderEliminarBuena review felicitaciones, me fascinó el final, y no solo la última escena si no que el capítulo entero, Walt visitando de fugitivo a quienes tenía que visitar para armar su victoria post-mortem. Faltó mencionar la escena de Jesse niño armando esa hermosa cajita, de la cual relata la historia en el centro de rehabilitación. Épico final, mejor serie que he visto en mi vida. Atento al genio Guilligan de ahora en adelante, Gracias!
ResponderEliminarPuerta grande no. Enorme.
ResponderEliminarSiempre habrá una serie que esté a la altura, no es el fin del mundo ;)
ResponderEliminarObviamente, sabíamos que algo iba a pasar, pero discúlpame si te digo que no me esperaba que fuera a ser así. No sé, a mí me sorprendió... es la gracia del asunto.
ResponderEliminarNo olvidado.
ResponderEliminarHa sido un final muy emotivo, y como dices al final Walter consigue salvar a los suyos sacrificándose él: se convierte en héroe por primera vez.
ResponderEliminarYo nunca creí que se suicidaría.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo.
ResponderEliminarOzymandias fue el final. Granite State y Felina, el epílogo.
ResponderEliminarSiempre habrá una serie que sobresalga sobre las demás. Es ley de vida.
ResponderEliminarNo me acordaba de ese detalle pero es genial!
ResponderEliminarEs mi favorita también ;)
ResponderEliminarAlgo iba a hacer, claramente ,)
ResponderEliminarEs lo que digo: al final Walter se convierte en el héroe (ambiguo) que nunca fue, dando su vida por los suyos y despidiéndose por todo lo alto.
ResponderEliminarNo demostró que no fuera un monstruo. Tampoco demostró que fuera bueno: fue humano, cegado por la ambición y el poder. Egoísta.
Ha sido un final muy digno y sin duda un muy buen cierre para la serie, aunque quizás se ha querido dejar al espectador contento haciendo que todo acabe más o menos bien (arreglarlo todo era absolutamente imposible) pues se puede decir que al final el amigo Walter muere en paz.
ResponderEliminarComo digo es un buen final, pero quizás demasiado complaciente, quizás hubiera sido mucho más dramático, rompedor (y muy comentado y criticado) un final donde en la escena final con los nazis, estos mataran a Walter sin más y continaran vendiendo su droga explotando a Jesse (aunque sin Lydia, que esa no se libra del veneno). Sé que este final alternativo que propongo suena demasiado cruel, pero el mundo de la droga es así, no hay final feliz, al igual que Walter destronó a los anteriores "señores" de la droga, al final él sería destronado de la forma menos elegante, como bien nos tienen acostumbrados este grupo de neonazis.
Repito que el final de la serie me ha gustado y me parece un muy buen final, pero pienso que algo como lo que propongo hubiera puesto la serie a un nivel legendario.
Saludos.
en absoluto pienso que sean malos, si son geniales. Pero la serie estaba "acabada" desde hacía dos capítulos
ResponderEliminarMe encanta que contestes a todo el mundo. La lata que tiene que ser no te lo tienen en cuenta!
ResponderEliminar¿Alguien más estallo en llanto cuando Jesse se va en el auto gritando de felicidad ? fue notable ...
ResponderEliminarSí, yo también he mencionado lo de complaciente, pero tampoco veo necesidad en hacer algo más rompedor. Acaba de una manera casi perfecta y no necesita romper moldes porque ya lo ha hecho durante seis años. Lo prefiero así.
ResponderEliminarYo aplaudí.
ResponderEliminarNo me cuesta nada ;)
ResponderEliminarSí, es una manera no dar todo el protagonismo al final, como suele pasar muchas veces, sino que de esta forma se le da la importancia a la serie en todo su conjunto. Quizás en frío se aprecie mucho más este tipo de finales cuando vuelves a ver la serie pasados unos años, le dan mucho más empaque. He de reconocer que quizás me pudo el ansia de acción o de que algo espectacular pasara, cuando bien mirado, tal como lo hicieron puede ser lo más conjuntado
ResponderEliminarMuy buen review.
ResponderEliminarComo alguien por ahi dijo, el punto algido de la serie fue Ozymandias. Este episodio no supera ese nivel pero cierra de manera satisfactoria y congruente la serie.
Hay que tomar en cuenta que hay dos elementos en la tabla periódica: Walter White y Heisenberg. El hombre de familia que pretende ser el esposo y padre perfecto ante todos y el capo poseedor de una mente maestra criminal con pretensiones y ambiciones desmedidas. Ambos se manifestaban y reaccionaban de acuerdo a las circunstancias y los elementos que los rodeaban.
En el ultimo capitulo, no vemos a ninguno. Ambos fueron destruidos en los dos capitulos anteriores.
Mr. Lambert es un fantasma, tetrico, inerte, sin vida. Producto de los vapores obtenidos por la combustion de ambos elementos y que busca saldar cuentas antes de disiparse en el aire.
me encanto que fuera un final cerrado y que todos los personas cerraran su ciclo, definitivamente no me gusto que al final el quedara como el malo, si es culpable de muchas cosas pero me hubiese gustado q muriera estando feliz porque su familia lo perdonara y no de esa forma tan solitaria, excelente serie, la vi en un mes las 5 temporadas y wow tardare mucho en superarla, ya veo porque es tan valorada, todos hacen actuaciones historicas.
ResponderEliminarPD: me encanto la muerte de todd, yo queria ser jesse en ese momento.
Lo que aprendí con Breaking Bad... bitch!
ResponderEliminarhttp://terecomiendounapelicula.com/2014/04/19/lo-que-aprendi-con-breaking-bad/
El final fue el más adecuado para esta serie, un final cerrado que deja al espectador satisfecho con el broche de la historia. El trabajo ha sido espectacular; por un lado el argumento y la trama han logrado una impresionante evolución de los protagonistas, y a su vez las actuaciones de estos han sido impecables. Será considerado un clásico en el mundo de las series a nivel mundial.
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