Frank Underwood: Claves para entender al protagonista de House Of Cards

Con Frank Underwood (55 años) hay que tener cuidado. Lleva más de 20 años en el Congreso de los Estados Unidos y la clave de su ascenso en la política no ha sido ganándose al electorado precisamente, sino más bien gracias a su gran habilidad para lograr acuerdos, hacer y cobrar favores y juntar votos de otros congresistas. 

Underwood es un animal político, estratega, manipulador, mentiroso y, sobre todo, un hipócrita y pragmático despiadado. Tiene la habilidad de adelantarse a los hechos y su facilidad discursiva la utiliza como recurso para convencer al resto de lo que él quiere. Frank usa a las personas y luego las desecha, acostumbrado a evaluar costo/beneficio. 

La tragedia de una infancia dolorosa 

Frank es un demócrata que nació en Carolina del Sur en un pequeño pueblo llamado Gaffney, donde la agricultura es el fuerte económico. Este es el distrito al que él ha representado en las últimas 11 elecciones consecutivas. 

Él trata de visitar su pueblo una vez al mes para guardar las apariencias con su electorado, pero en realidad detesta su pueblo natal, porque le recuerda mucho a su padre. Underwood padre era un cultivador de duraznos sin éxito, un hombre callado, casi invisible y nadie —ni siquiera su esposa— le tenía respeto. Murió de un infarto a los 43 años, pero durante sus últimos veinte años de vida sufrió una grave depresión, intentó suicidarse y desde ese momento se volvió alcohólico y violento con su familia. Lo único que Frank deseaba era que él muriera pronto, pues ya desde pequeño su pragmatismo le decía que un hombre como su progenitor era “una pérdida de oxígeno”. 

Una juventud feliz y el comienzo de su carrera política

En 1977, Frank Underwood entró a estudiar a The Sentinal Militar Academy, donde le enseñaron sobre honor, deber y respeto. Al graduarse de esta academia militar, Frank estudió leyes en Harvard y se convirtió en uno de los legisladores más jóvenes de la nación. 

Pese a todo lo que se puede inferir sobre su personalidad, Frank no siempre fue un tipo frío o, por lo menos, no lo era antes de entrar al mundo de la política. Durante su juventud, existió un Frank amistoso, leal y enamorado (tenía una pareja homosexual). Su ingreso a la Academia estuvo marcado por una vocación de servicio, aunque ya desde esa época mostraba atisbos de rebeldía. 

En 1980, Frank se postuló como oficial público de la senaduría de Carolina del Sur y es en ese período cuando conoce a Claire. El padre adinerado de ésta le ayudó a financiar su candidatura. Claire y Frank se casarón hace 27 años y deliberadamente han decidido no tener hijos. Para Frank, la paternidad no es una meta en la vida. 

Ser poderoso significa no ser esclavo de nadie

Underwood no se mueve en el mundo de la política por convicciones ideológicas, sino por sus ansias de poder. El hace una específica distinción entre Poder y Dinero (conceptos usualmente confundidos por las personas). El dinero puede comprar influencias, pero dura unos años. Mientras que el poder es una inversión a largo plazo y es una influencia en sí mismo, como señala Frank en varias ocasiones. La clave para entender su actuación es comprender que él siente una aversión por ser esclavo de alguien. No le gusta que lo controlen y el tener poder significa no ser subyugado por nada ni por nadie. 

“No tengo paciencia para el dolor inútil” 

Al comienzo de House of Cards, Frank describe dos tipos de dolor: “el dolor que te fortalece y el dolor inútil”. Desde su pragmatismo, esta diferenciación es plausible y se convierte en una filosofía que marca su vida y que nace en su infancia al ver a su padre sufrir irremediablemente. “En momentos así, se requiere que alguien actué, que haga lo más desagradable, lo necesario”. Con esta frase, Frank declara que no tiene tapujos para tomar cualquier acción que él considere necesaria. Underwood no necesita consejos de nadie, se guía a sí mismo en esta intolerancia por esperar que la vida misma siga su propio curso. 

¿Fue la política o Claire quién transformó a Frank en un asesino? 

Muchos describen a Frank como un oscuro político y pocos recalcan su perfil sociópata. Personalmente, creo que Claire es quién lleva a Frank a un punto sin retorno. En la segunda temporada de House of Cards, Frank señala que no sabe si sentir miedo o admiración por su esposa. Ella ha mostrado sus verdaderos colores y puede ser mucho más despiadada que su marido. Me inclino a pensar que es ella, y no sólo la política, quien ha diseñado al hombre que Frank es hoy. La gran diferencia entre Claire y Frank es que la primera siente pesar, sufrimiento al hacer daño y utilizar al resto. Pero Frank no conoce la palabra remordimiento. Si me preguntan quién es peor persona, quién es realmente perverso, diría que Claire Underwood; pues no hay peor ser humano que el que daña sabiendo lo que hace. Por el momento, para mí, Frank es un enfermo mental. Un claro sociópata. 

 ¿Vosotros qué opináis del complicado personaje? ¿qué os ha parecido House of Cards?