¿No ha llegado septiembre y ya tienes la sensación de que te has hartado de ver la sexta temporada de American Horror Story? No te preocupes, no estás solo. La serie antológica de terror y melodrama de Ryan Murphy ha comenzado la que se conoce como la campaña publicitaria más intensa y cansina del año y, a razón de teaser por día, llegar a la línea de salida se torna una misión imposible.
A pesar de todo, American Horror Story forma parte del pasado. Después de seis temporadas, con reemplazo de lead artist a mitad de camino —ni más ni menos que Lady Gaga—, todo lo que tiene que ver con ella resulta obsoleto. La caída en picado de los ratings —Hotel tuvo un rating medio de 1.49, en comparación con el 1.91 de Freak Show, el 2.2 de Coven; es la segunda temporada menos vista desde Asylum (1.4)—, la escasa publicity precampaña, y el movimiento de Murphy a otros derroteros, demuestran que aunque la marca AHS siga siendo rentable —especialmente de cara a las ventas internacionales— no es ni tan noticiable ni mucho menos tan fresca como hace unos años.
Murphy, culo inquieto, rey midas, y posiblemente el creador más pasional de la televisión estadounidense, sabe que su creación ya no es lo que era y, al igual que sucedió con Glee, no duda en embarcarse en nuevos proyectos. El éxito de American Crime Story, donde firma como productor y no como showrunner ni creador, o el reciente fiasco de Scream Queens —que Fox mantendrá en antena durante el tiempo en el que sea rentable como marca, ya que ni como producto funciona—, mantienen a Murphy ocupado en otras propuestas.
No obstante, quizás el proyecto que más ha deseado realizar este creador es el de Feud, que finalmente verá la luz el próximo año en el canal FX. Feud será, previsiblemente, otra serie antológica cuya primera temporada narrará la legendaria rivalidad entre Bette Davis y Joan Crawford, enemigas de toda la vida, en el rodaje de ¿Qué fue de Baby Jane? de 1962. Murphy previamente había presentado la idea a HBO en formato de telefilme allá por 2013, a lo que la cadena se negó rotundamente, por lo que Murphy humildemente se bajó los pantalones y le contó a Michael Lombardo la historia de The Normal Heart, que encajaba perfectamente en el histórico gay/AIDS-related de la cadena, y cuyo recorrido ya conocemos.
Creo firmemente que no solo el ego del productor se sintió hundido con aquel rechazo, porque para Murphy esto es algo más. Es más que evidente que Murphy, presidente de un club de fans de Meryl Streep en su juventud, ha tenido desde hace años el sueño húmedo de mostrarle al mundo su visión de una de las relaciones más dramáticas e icónicas de Hollywood, y que no se iba a olvidar de ella de la noche a la mañana. Aunque a Murphy se la pongan dura el slasher, el vestuario de época, y un buen plantel de estrellas, no hay algo que le guste más que una diva. Feud es, en ese sentido, su fetiche definitivo. Y bien cargado de divismo.
Jessica Lange y Susan Sarandon —que ya habían “firmado” para estar en la versión de HBO—, serán en Feud respectivamente, Davis y Crawford. Les acompañarán Alfred Molina como el director de la cinta Robert Aldrich, Stanley Tucci como el jefazo Jack L. Warner, Judy Davis como la famosa cotilla Hedda Hopper —quien supongo que protagonizaría la segunda temporada, centrada en su enemistad con Louella Parsons—, y Catherine Zeta-Jones como Olivia de Havilland. Estos nombres solo de momento, en un proyecto que se encuentra en las primeras fases de su desarrollo. Tres nombres de Oscar, y otros dos con nominación —que para la tele es casi lo mismo—. Tela.
Puede ser que Feud sea una tremenda decepción, repleta de mamarrachismo barato –que funciona en Scream Queens pero no en todas partes— y muchos cigarrillos, pero no es lo que parece. Feud es la serie que Ryan Murphy desea hacer desde hace años, y para alguien que últimamente parece firmar proyectos más por alusión que por devoción, eso significa algo. Glenn Close espera tu llamada, Ryan.
Nota 20:53; Mis perdones por no acordarme de la rivalidad entre Olivia de Havilland y Joan Fontaine, una historia con más posibilidades de formar parte de la serie que la de Hedda Hopper y Louella Parsons.
Nota 20:53; Mis perdones por no acordarme de la rivalidad entre Olivia de Havilland y Joan Fontaine, una historia con más posibilidades de formar parte de la serie que la de Hedda Hopper y Louella Parsons.
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